Un paciente agrede a un médico del centro de salud de San José Artesano

El Área de Gestión Sanitaria del Campo de Gibraltar informó ayer de que ha activado el Plan de Prevención de las Agresiones del Servicio Andaluz de Salud (SAS), que incluye asistencia sanitaria y jurídica, así como apoyo psicológico, ante un episodio de violencia sufrido por un profesional en la Unidad de Gestión Clínica Algeciras Norte, el ambulatorio de San José Artesano.

Tanto el Área de Gestión Sanitaria como la delegación territorial de Igualdad, Salud y Políticas Sociales mostraron su solidaridad y apoyo al profesional médico, que, en el ejercicio de su labor, fue agredido por parte de un paciente, que irrumpió en la consulta mientras atendía a otro usuario.

El Sindicato Provincial de Sanidad de CCOO detalló que el incidente se produjo el pasado martes y que la agresión ha sido denunciada en la Comisaría de la Policía Nacional, estando en espera de que se celebre un juicio rápido próximamente. El sindicato igualmente explicó que en la misma agresión sufrió lesiones también el usuario que en ese momento estaba siendo atendido por el facultativo.

CCOO ha convocado a los profesionales y usuarios del centro a una concentración de protesta por lo ocurrido, que tendrá lugar mañana a las puertas del ambulatorio.

Comisiones Obreras denunció que el centro de salud de San José Artesano no tiene vigilante de seguridad, a pesar de que esta organización "en reiteradas ocasiones" ha pedido a los responsables de la administración del Área Sanitaria para todos los ambulatorios de la comarca la presencia de un profesional de este tipo durante el periodo diario en el que se presta asistencia sanitaria a los usuarios.

CCOO agregó que la experiencia indica que la presencia de un vigilante de seguridad tiene un efecto muy disuasorio en las personas que tienen intención de agredir verbal o físicamente a los trabajadores y trabajadoras de los centros.

El Área de Gestión Sanitaria recordó que la agresión física o intimidación grave contra profesionales sanitarios en el ejercicio de su función pública asistencial viene siendo considerada como delito de atentado por los tribunales de justicia, y que así se han dictado sentencias en estos casos, castigándose con penas de uno a tres años de prisión.

La consejería de Igualdad, Salud y Políticas Sociales destacó que condena cualquier tipo de violencia, tanto física como verbal, dentro o fuera de un centro sanitario, y enfatizó que bajo ningún concepto o circunstancia puede justificarse este tipo de actuaciones. Tanto el director gerente del Área de Gestión Sanitaria del Campo de Gibraltar, Andrés Morillo, como la delegada territorial, Miriam Alconchel, se sumaron a esta condena y expresaron públicamente su solidaridad con el médico afectado.

El SAS indicó que pone a disposición de sus trabajadores un plan de prevención con el objetivo prioritario de reducir las posibles agresiones incorporando, además de un protocolo de actuación con asistencia jurídica y apoyo psicológico, una serie de herramientas tales como cursos de formación en manejo de situaciones conflictivas, adaptaciones de locales y ubicación de profesionales y análisis de las incidencias que se producen, entre otros.