La comarca gana con sus manetos

Tres campogibraltareños consiguen premios en la primera copa de España de perros de cazal dominio Los hermanos Chico de Tesorillo y Rafael Godoy copan los tres premios en la categoría de manetos en el concurso celebrado en Villanueva de la Fuente.

Los ganadores en las diferentes categorías y el jurado posan tras la entrega de premios.
Los ganadores en las diferentes categorías y el jurado posan tras la entrega de premios.
A. R. / Algeciras

15 de diciembre 2008 - 01:00

La afición por la caza crece día a día en la comarca, así como el nivel de los perros de caza de razas andaluzas como podencos y manetos. Buena muestra de ello es que tres personas del Campo de Gibraltar cosecharan premios en la reciente edición de la Copa de España del Podenco Andaluz y Maneto, celebrada a primeros de mes en Villanueva de la Fuente (Ciudad Real).

Los hermanos Cano, de San Martín del Tesorillo (Jimena), resultaron ganadores en la categoría de manetos con su ejemplar hembra Pipi y otro de sus perros, un macho llamado Niño, quedó en tercer puesto. La subcampeona en esta categoría fue Layka, una maneta procedente de Algeciras propiedad de Rafael Godoy. Por tanto, el podio en la categoría estuvo copado por campogibraltareños, demostrando así el arraigo de esta raza en los montes del Campo de Gibraltar. Además, uno de los jurados procedía también de la comarca. El concejal barreño Javier Grimaldi es a su vez delegado nacional del podenco de la Real Federación Española de Caza.

La copa de España, que el próximo año adquirirá categoría de campeonato de España, comenzó con el sorteo de las baterías de caza, correspondiendo siete de podencos y una de manetos. El concurso contó con la participación de 50 podencos andaluces y ocho manetos. Los aspirantes procedían de zonas como la Comunidad Valenciana, Castilla la Mancha, Murcia, Andalucía, Madrid y Castilla y León. La representación de jueces también fue numerosa. El coto El Canónico fue el lugar escogido para realizar las pruebas. Se trata de un coto cuyo terreno es ideal para la caza del conejo, con monte bajo y zonas muy tupidas para que los podencos demostraran todas sus habilidades. Por su parte, la zona escogida para los manetos, un arroyo con zarzas, también resultó ideal para que los canes demostraran su valía y fortaleza ante la dura vegetación.

Tanto es así que hubo momentos en que varios manetos se encontraron a la vez entre las zarzas con distintos conejos e incluso hubo dos perros que cazaron varios conejos a diente.

La final fue muy espectacular porque la orografía de la finca permitía tener una buena visión desde una ladera cercana. La jornada concluyó con la entrega de premios y un almuerzo de despedida.

Envía tus convocatorias a viviraqui@europasur.com

stats