De voluntario en Los Alcornocales

El voluntariado ambiental está en auge. Este verano y por decimonovena edición, la Consejería de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente inicia el programa de campo en varios parques naturales de Andalucía. Entre ellos, el de Los Alcornocales, cuyos 20 jóvenes seleccionados han comenzado este fin de semana las actividades.

El proyecto que se desarrollará en este parque se denomina El alcornocal: diagnóstico y conservación y tiene una especial relación con la seca del alcornoque, el principal problema de los árboles del parque. Así, está previsto que los participantes realicen cinco trabajos para mejorar el estado ambiental y ecológico de estos montes, que consistirán en la realización de un inventario en transeptos del estado de salud del arbolado en el alcornocal, un análisis y control del estado de los cerramientos instalados para el control de herbívoros, retirada de plantones y censo de población de herbívoros dentro de los cercados secos.

El director conservador del parque, Juan Manuel Fornell, indicó que el campo de trabajo se planteó en los montes públicos, donde años anteriores se han hecho cerramientos para regenerar el monte con vallados que impedían la entrada de animales. "En estos días se trata de comprobar si han pasado ciervos y cómo va la repoblación de las especies", señala Fornell, quien destaca que se realiza un trabajo completo por parte de los voluntarios.

El director del parque añade que el problema de la seca se aborda en este campo, no obstante añadió que es un tema complicado y el primer día se imparten nociones generales.

"No se sabe bien cual es la causa de la seca. Cuando el arbolado está muy débil cualquier cosa le ataca", aclara el director de Los Alconocales, quien señala que en ocasiones los árboles no son tan jóvenes y tienen múltiples problemas.

Así mismo, destaca Juan Manuel Fornell que la seca no sólo afecta a los alcornoques sino también a las encinas. "El cambio climático también tiene mucho que ver. Casi todos los árboles tienen problemas", apunta.

Además de la jornada de preparación y las explicaciones sobre la seca, los voluntarios comprobarán como se encuentra el cercado instalado por los técnicos, si es necesario restaurarlo y cómo están creciendo los plantones.

Los participantes realizarán también un censo de población de herbívoros dentro de los cercados secos.

Además, durante estos días, los voluntarios realizarán otras actividades recreativas y socioculturales que incluyen propuestas de ocio y tiempo libre, como deportes de bajo impacto en el medio natural -multiaventura y senderismo-, visitas al complejo arqueológico de Baelo Claudia y al municipio de Alcalá de los Gazules y el núcleo de Bolonia, entre otras. Además, podrán participar en talleres de aromaterapia, juegos tradicionales y buenas prácticas ambientales.

Finalmente, los voluntarios que se organizan en grupos realizarán un trabajo con los resultados obtenidos que entregarán a sus monitores para que los técnicos de Medio Ambiente lo tengan en cuenta para próximos trabajos. "Son informes que ayudan para continuar con el trabajo", sostiene Fornell, quien destaca que los asistentes al campo son seleccionados de todas las provincias de Andalucía y cuentan con alojamiento y manutención completa durante los diez días que duran las actividades.

En los otros campos que la Consejería de Medio Ambiente ha organizado, los participantes realizarán actuaciones encaminadas a la protección de la flora y fauna, la defensa del medio forestal, el diseño y construcción de uso público, la recuperación del patrimonio histórico-etnológico y la conservación del litoral. Para ello, desarrollarán actividades relacionadas con el diseño y restauración de senderos, construcción de majanos, creación de un banco de semillas, elaboración de conservas, restauración de ecosistemas fluviales, muestreos de libélulas, conservación de ríos de montaña, interpretación y educación ambiental o vigilancia de nidos de rapaces, seguimiento de especies, entre otras.