Tribuna abierta
Joyas de papel: La colección Antonio Viñas de Roa
A las 13.30 horas de ayer y rodeado de los suyos, falleció en su domicilio de Zaragoza el empresario Justo Ojeda Ruiz, titular de la explotación de la plaza de toros de El Puerto de 2000 a 2007, víctima de una larga enfermedad.
Durante toda la tarde, en su domicilio zaragozano del número 14 de la plaza Mariano Arregui, se han recibido numerosos testimonios de pesar de todo el planeta del toro. El sepelio será mañana martes 4, a las 10 de la mañana, en el tanatorio de "El Torrero", en la capital aragonesa.
Justo Ojeda, de origen humilde y desvinculado familiarmente del mundo del toro, nació en la localidad jiennense de Sorihuela de Guadalimar en mayo de 1938, pero muy joven se desplazó a Zaragoza comenzando en la organización de festejos taurinos y con el apoderamiento de Blas Romero "El Platanito" una carrera empresarial ascendente, a base de lucha, hasta llegar arriba .
Empresario de hostelería, durante muchos años regentó en Zaragoza el asador "Don Justo" y en los últimos años tenía intereses en la crianza de vinos de la denominación de origen Cariñena.
Desde 1979 regentó la plaza de Huesca, su buque insignia, explotando igualmente cosos como Castellón, Burgos, Badajoz, Calahorra, Alfaro, Tarazona, San Martín de Valdeiglesias, Hellín, Colmenar, Valdemorillo, Zaragoza o Valencia. Ganadero de bravo durante un corto periodo, sus mayores ilusiones fueron regentar Las Ventas y El Puerto, presentándose dos veces a ambas plazas; en el caso de la Plaza Real en 1986 y en 2000, ganado el concurso este último año y mereciendo la prórroga hasta 2007.
Deja una importante huella en el mundo del toro, donde representó a toreros como Vicente Barrera, Javier Conde, Justo Benítez, Niño de la Taurina o Fernando Cámara. A sus hijos Pilar, Teresa y José Miguel y a su esposa Rosa María Lozano, nuestro pesar.
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