El Ayuntamiento de Algeciras niega el uso a la comunidad islámica de una biblioteca pública cerrada desde 2019

La biblioteca pública de gestión municipal Esteban Valdivia y Cabrera, ubicada en lo alto de la calle Miguel Hernández, en El Saladillo, lleva cerrada desde el año 2019. Se trata de la única biblioteca que existe en la citada barriada y en las vecinas de La Yesera, La Piñera, Los Toreros y Cortijo Vides.

Varios grupos políticos de muy distinto signo, desde Izquierda Unida a Vox, llevan tiempo denunciando el problema que sufren los niños y jóvenes de esta zona de Algeciras, densamente poblada, para acceder a recursos educativos básicos y la necesidad de contar con un espacio de estudio, con acceso wifi para los estudiantes, una amplia selección de libros, climatización adecuada y horario extendido de mañana y tarde.

Esta biblioteca fue creada en 1996, pero lleva cerrada al público de manera indefinida desde 2019, con la excepción de algún acto puntual, como cuando en 2023 se regalaron guitarras a niños sin recursos de la zona sur de la ciudad a través del proyecto Un niño, una guitarra, un corazón con la colaboración de la Asociación Sirimusa y la Fundación La Caixa o un cuentacuentos en 2022 de la mano de Márgenes y Vínculos.

En alguna ocasión, la concejal delegada de Cultura en el Ayuntamiento, Pilar Pintor, ha explicado que el motivo del cierre de este espacio es "la falta de personal".

Purificación Alonso, coordinadora local de IU en Algeciras, ha criticado la gestión del Consistorio y ha recordado que la biblioteca del Saladillo, bajo la administración del Partido Popular (PP) desde 2011, ha sufrido un "abandono progresivo que culminó en su cierre definitivo hace cinco años". Según esta formación, un incidente reciente con la comunidad islámica Al Rahmah ha agravado la situación.

"Este colectivo solicitó el uso del espacio para celebrar la clausura de sus clases de árabe para niños el pasado viernes, 14 de junio", informa IU a través de una nota. "A pesar de haber cumplido con los procedimientos requeridos, su petición fue rechazada por el Ayuntamiento, que alegó que la biblioteca estaba reservada para actividades socio-culturales. Sin embargo, miembros de la comunidad grabaron un video que muestra la biblioteca cerrada y sin actividad durante el horario solicitado".

Según Izquierda Unida, la negativa del Consistorio a ceder la biblioteca del Saladillo para el evento de esta comunidad islámica ha generado indignación. Mohamed El Kammas El Moqadem, miembro del colectivo, ha compartido su frustración: "Solicitamos el uso de la biblioteca con antelación y nos dijeron que estaba ocupada, pero claramente no fue así. No entendemos por qué se nos niega el acceso a un espacio que debería ser de todos los vecinos". Por todo ello, IU ha exigido una explicación y la reapertura inmediata del centro que lleva el nombre de Valdivia Cabrera, periodista y escritor algecireño.

No es la única biblioteca pública de Algeciras con problemas de personal. Como publicó Europa sur el pasado mes de marzo, el Centro Documental José Luis Cano, que alberga los fondos de Cristóbal Delgado, ha pasado de tener nueve a tres trabajadores en diez años. Actualmente, la plantilla está formada por cuatro personas, y una está de baja, para ocuparse a todas las plantas, en turnos de mañana y tarde. Esta carencia unida a la falta de mantenimiento está provocando una drástica disminución del número de visitantes que utiliza las instalaciones.