Cultura aprueba el proyecto de derribo interior de la Casa Millán

Algeciras/La Comisión Provincial de Patrimonio ha aprobado el proyecto de derribo interior de la Casa Millán tras conocer el proyecto presentado por la empresa propietaria del edificio y comprobar que este respeta los condicionantes que le afectan al formar parte del entorno de la iglesia de La Palma, en proceso de incoación como Bien de Interés Cultural (BIC).

La Consejería de Cultura da así vía libre a un proyecto que prevé convertir el edificio hoy en ruinas en un inmueble nuevo que tan solo conservará su bella fachada original, sostenida desde hace meses por un armazón de andamios que evita que se venga abajo.

El proyecto diseñado por la promotora algecireña San Atanasio SL prevé la construcción de locales comerciales en su planta baja y de viviendas en la superior sobre una superficie de 900 m(2), en la que se incluyen dos solares anexos y que se conectarán interiormente con la Casa Millán a través de un patio interior. El conjunto contará también con una planta sótano que se destinará a garaje.

Situada entre las calles Ventura Morón y Teniente García de la Torre, la Casa Millán está incluida en el catálogo municipal de patrimonio como un edificio de notable interés arquitectónico, aunque carece de protección por sí mismo. Sí lo tiene por su cercanía a La Palma, por lo cual, según establece la Ley del Patrimonio Histórico de Andalucía, la ejecución de cualquier obra, cambio (desde el uso, hasta la pintura o las instalaciones) o antes de colocar cualquier clase de rótulo, señal o símbolo, se requiere de la preceptiva autorización de la Consejería de Cultura.

Y esa autorización, advierte la normativa, debe ser previa a la concesión de cualquier otra licencia. En caso de no contar con ella, el permiso que se concediese sería nulo.

Esta situación provocó un rifirrafe con el Ayuntamiento de Algeciras, que desoyó las advertencias de Cultura y aprobó la licencia de derribo interior al considerar que la Junta iba más allá de sus competencias. Sin embargo, los promotores no hicieron uso de dicha autorización municipal ni llegaron a abonar tasa alguna por ella, prefiriendo presentar ante Cultura el proyecto que se acaba de visar.

Salvo imprevistos y según un representante legal de San Atanasio, en el plazo aproximado de un mes comenzarán los trabajos para consolidar en primer lugar la fachada y dar paso posteriormente al derribo del interior. La actuación está presupuestada en 79.779 euros, con un plazo de ejecución de tres meses.

También se prevé la retirada de elementos ornamentales y de la cerrajería del edificio, para restaurarlas y que vuelvan a su lugar una vez que se reconstruya el inmueble.

Estos son precisamente algunos de los elementos más singulares del edificio, que data de finales del siglo XIX y cuyo arquitecto es desconocido. Su uso siempre estuvo relacionado con su importante emplazamiento en la Plaza Alta, de ahí que fuera comercial, residencial y una consulta médica.