Estampas de la historia del Campo de Gibraltar
Construcción de la estación marítima del Puerto de Algeciras (1927-1928)
FERIA TAURINA DE ALGECIRAS 2023
Varios ayuntamientos del Campo de Gibraltar, Algeciras entre ellos, tomaron la decisión, desde por la mañana, de suspender las hogueras previstas en sus respectivas playas con motivo de la celebración de la Noche de San Juan. La Agencia Estatal de Meteorología anunciaba fuertes rachas de viento de levante durante la tarde y la noche.
La noticia corrió como la pólvora a la hora del sorteo en la plaza de toros de Las Palomas entre los apoderados y las cuadrillas. Mal augurio. El viento siempre ha sido el peor enemigo de los toreros. Durante la frugal comida, ni una palabra al matador. Si las previsiones no son buenas, mejor callarse.
Los apoderados de antes solían correrle las cortinas a sus espadas porque creían que el aislamiento les beneficiaba. Ahora, cada diestro mata las horas como puede, pero algunos han heredado ese angustioso retiro matinal de los antiguos.
Cuando llegó la hora de la corrida, las siete y media de la tarde, el levante molestaba, a Morante sobre todo, porque abría cartel, pero no tanto como lo esperado. En cualquier caso, la AEMET dejó sin sus tradicionales hogueras a la noche más breve del año.
Emilio de Justo conoce a la perfección las miserias del mundillo del toro. El arrastrarse por plazas portátiles, pechar con las ganaderías que nadie quiere, acabar en enfermerías donde lo mejor es cerrar los ojos y dejarse ir, verse anunciado en un cartel y no saber cuándo llegará el siguiente. Ser un desahuciado del sistema y cobrar dos duros por ello. Salir de esa tristeza está en manos de muy pocos. En primer lugar, porque hay que ser un grandioso torero para lograrlo y, en segundo, porque no desfallecer durante el camino es una tarea hercúlea.
De Justo torea ahora en todas las ferias y, dentro de ellas, en carteles de relumbrón, aunque no le ha vuelto la cara a las corridas duras. Verle ante el toro da gloria. Este viernes salió a hombros de Las Palomas tras cortar dos orejas, aunque el público pidió insistentemente tres. Su forma de ajustarse la hombrera derecha, de citar al toro, de encajarse y embarcarlo, con tanto temple y torería, es madera de figura. Además de su forma tan cabal de entrar a matar, sin un alivio.
Como también es de figuras alentar a aquellos que se encuentran en esa miseria que él ha sondeado en todas sus facetas. De ahí, la emoción contenida del brindis que el pacense le ha hecho a su compañero, David Galván, antes de torear al quinto. Creer en uno mismo cuando nadie más lo hace, la soledad del torero que se labra su porvenir cada tarde, es cosa de hombres de otros tiempos. Hombres que deberían ser faro y ejemplo.
Los ojos de Galván, diestro afincado en Algeciras, a duras penas contenían las lágrimas durante la salida a hombros junto a Emilio de Justo al finalizar la corrida. El espada que cerraba plaza ha cortado tres orejas en Las Palomas, proclamándose el triunfador numérico del festejo. Ha pechado con el lote más serio de presentación -el tercero, de Torrestrella, era un tío- y se ha jugado el pellejo con honradez y gallardía. También con mucha generosidad, dejándose llegar de lejos al sexto, de Lagunajanda. Bastaba verle el terno manchado de sangre hasta el último bordado para comprobarlo. David Galván ha emocionado a sus paisanos porque ha dado todo lo que tiene, todo lo que lleva dentro y todo por lo que sacrifica sus días.
Los toros de esta peculiar corrida concurso con seis ganaderías de procedencia Domecq -un romántico acierto por parte del empresario, Carmelo García- también han influido en el feliz final de la tarde. Los ejemplares de Jandilla, Salvador Domecq y Torrestrella destacaron en el buen conjunto. Algunos tomaron con alegría los tres puyazos, algo demasiado difícil de presenciar hoy en día.
La nota agridulce, la de Morante, que no suele tener suerte en los sorteos. Tampoco este viernes. Sin embargo, estuvo impecable con su lote. No se alivió ni utilizó la excusa del viento para quitarse al primero de encima, el de Juan Pedro Domecq, muy desmochado, eso sí. Hay plazas que se le resisten al de la Puebla y Algeciras es una de ellas. Qué se le va a hacer.
Plaza de toros de Las Palomas. Tercer festejo del abono. Media plaza. Sopló el levante, sobre todo en los primeros toros. Entre el público, se encontraba el cantaor Rancapino, a quien David Galván brindó un toro. También los matadores Manuel Escribano y Miguel Ángel Pacheco, que este sábado lidiarán la de Victorino Martín.
Corrida concurso de ganaderías de sangre Domecq. Se lidiaron, en este orden, toros de Juan Pedro Domecq, Jandilla, Torrestrella, El Torero, Salvador Domecq y Lagunajanda. Los mejores fueron 2º y 5º, el lote de Emilio de Justo, aunque también sacaron casta 3º y 6º, lote de David Galván. Morante pechó con los ejemplares más deslucidos.
Morante de la Puebla, de verde menta y azabache, ovación y división de opiniones; Emilio de Justo, de nazareno y oro, oreja tras aviso y oreja con petición de la segunda; David Galván, de blanco y plata, oreja y dos orejas.
Los premios quedaron de la siguiente manera:
También te puede interesar
Estampas de la historia del Campo de Gibraltar
Construcción de la estación marítima del Puerto de Algeciras (1927-1928)
Lo último
Luis Calabozo, director general de la Federación Nacional de Industrias Lácteas (Fenil)
“Los productores de leche necesitan modernizarse para garantizar el aprovisionamiento”
Contenido ofrecido por Gabarras y Servicios, S.A.
Contenido ofrecido por FSIE