Tribuna abierta
Joyas de papel: La colección Antonio Viñas de Roa
La Policía Local de Algeciras se incautó ayer de más de 2.000 prendas de ropa pertenecientes al Grupo Inditex en una inspección realizada en el mercadillo del Parque Feria, según pudo conocer este diario. Con la intervención fue detenida la titular del puesto ambulante, además de requisar todos los productos que estaban expuestos para la venta al público.
La actuación fue realizada por agentes del grupo V.I.C.T.O.R. de la Policía Local. En una inspección rutinaria se percataron de que en el puesto número 16 del mercadillo se estaban vendiendo prendas que pertenecían al grupo textil señalado. En este caso es conocido por firmas como Zara, Pull and Bear, Massimo Dutti, Bershka o Stradivarius, entre otras.
La Policía Local detectó, entonces, que se trataba de una situación irregular al comprobar que, incluso, las prendas llevaban el disco de antirrobo que se puede localizar en la ropa que hay en las tiendas para evitar los posibles hurtos de los productos.
Ante los hechos los agentes de la Policía Local detuvieron a la titular del puesto ambulante citado, cuyas iniciales son C.M.C., de 37 años, con domicilio en Santa Fe, ciudad ubicada en la provincia de Granada, según las informaron las mismas fuentes.
Las más de 2.000 prendas incautadas fueron trasladadas a la Comisaría de la Policía Nacional de Algeciras para realizar el estudio sobre la procedencia y, una vez las realizadas pruebas periciales, poder dar curso a la supuesta irregularidad cometida por la persona detenida, la cual también fue conducida a la instalación policial.
En este sentido, al tratarse de ropa de marca primero se debe analizar si las prendas son falsificadas o, en caso contrario, se trata de productos robados. De modo que, en base a estas investigaciones previas, se conocerá la causa que se le imputa a C.M.C.
En el primer caso la persona detenida sería acusada de un supuesto delito contra la propiedad intelectual. En la circunstancia de que se tratara de ropa procedente de un hurto anterior, sería un delito de recepción de mercancía robada, tal y como precisaron las fuentes consultadas.
Estas inspecciones se realizan de forma rutinaria entre los puestos ambulantes que se instalan cada martes en el mercadillo. Es una forma de calibrar la mercancía y la legalidad de los comerciantes.
También te puede interesar
Contenido ofrecido por FSIE