Juan Sierra, el cubismo y su escultura posmodernista de Blas Infante en Algeciras
28-F | DÍA DE ANDALUCÍA
Una conocida fotografía del "padre de la patria andaluza" ha sido el origen de la pieza, realizada mediante cuatro finas planchas de acero
Algeciras tendrá un nuevo monumento en honor a Blas Infante en la avenida Virgen del Carmen
Blas Infante cuenta desde este 28 de febrero, Día de Andalucía, con un nuevo monumento en la avenida Virgen del Carmen de Algeciras, adornando la rotonda que conecta con la calle Fuerte Santiago.
Se trata de una obra posmodernista, de clara influencia cubista realizada por el artista algecireño Juan Sierra quien, pocas horas antes de la inauguración, navegaba entre la ilusión, la gratitud, la incertidumbre y los nervios.
Una conocida fotografía del "padre de la patria andaluza" ha sido el origen de la pieza, realizada mediante cuatro planchas de acero autopatinable, también conocido comercialmente en España como Corten. "Si tomas la rotonda desde cualquier punto, o bien si te acercas a ella caminando, ves el rostro de Blas Infante. Era uno de mis objetivos. Que el ángulo no afectara a la visión completa de la obra", explica Sierra.
El anterior busto, fabricado con una pasta de cemento recubierta de pintura que simulaba el bronce con pátina, tuvo que ser retirado el pasado verano por su avanzado estado de deterioro. Fue entonces, un poco antes de comenzar la Feria de Algeciras, cuando el alcalde, José Ignacio Landaluce, contactó con Juan Sierra para hacerle este encargo.
"Estoy muy agradecido tanto al alcalde como a la responsable de Urbanismo, Yéssica Rodríguez, por confiar en mí y por su trato. Desde que presenté los bocetos ante varios concejales, el proyecto gustó mucho", rememora Juan Sierra, quien lamenta no haber contado con más tiempo (y quizá presupuesto) para perfilar su obra. "Al final, todo ha sido muy precipitado y he tenido la impresión de haber perdido un poco el control sobre la instalación de la pieza".
Ciertas incertidumbres
Reconoce que a nivel artístico se siente satisfecho, pero que a nivel técnico y material tiene "ciertas incertidumbres". "La zona donde se ha colocado la escultura está constantemente azotada por el viento de levante. Un día de temporal, no sé si la obra aguantará o se moverá", admite el artista. De hecho, durante su colocación, las planchas de acero se han reforzado con unas viguetas. "Quizá haya que asegurarla más en un futuro".
El hombre propone y Dios (o el levante) dispone. Torres más altas han caído. Juan Sierra, que en el pasado fue novillero, sabe mucho de contratiempos meteorológicos. En el plano artístico, aunque a contrarreloj, él ya ha hecho su parte.
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