La Justicia trata de dar salida a las narcolanchas apiladas en el Puerto de Algeciras

Las decenas de lanchas de todo tipo que se acumulan desde hace años en las instalaciones del Puerto de Algeciras, tras ser decomisadas a las redes del narcotráfico y del contrabando, aumentan cada día la posibilidad de que se produzca un accidente.

Los restos de combustibles y aceites, además de otros productos inflamables de estas embarcaciones, representan un peligro evidente ante la falta de adecuación del espacio habilitado para depositarlas. El riesgo se ha acrecentado por los robos de material por parte de personas que emplean todo tipo de herramientas para hacerse con motores o piezas de estos, incluidos sopletes.

Jueces, fiscales, Guardia Civil y Autoridad Portuaria de la Bahía de Algeciras (APBA) mantuvieron una reunión el pasado martes para tratar de buscar una solución a este problema en la que acordó la necesidad de evacuar cuanto antes todas las lanchas, bien para trasladarlas al depósito judicial habilitado para ello, bien para ser destruidas, como es el caso de la mayor parte de las semirrígidas, cuya navegación está prohibida.

Para ello y en la medida de sus posibilidades, según han indicado a Europa Sur fuentes de los asistentes a la reunión, los jueces se comprometieron a agilizar los procesos judiciales para evitar que las montañas de lanchas sigan creciendo a lo lo alto y ancho de los muelles, una circunstancia que, como factor añadido, hipoteca a la APBA al no poder disponer de ese espacio.

Las embarcaciones decomisadas constituyen una prueba de los delitos y quedan bajo custodia judicial: si son ilegales, como las semirrígidas, se dicta una orden para su destrucción, en tanto que las demás deben ir al depósito. No obstante, los tediosos trámites hacen que en muchas ocasiones se demore cada paso.