Análisis
Santiago Carbó
Algunas reflexiones sobre las graves consecuencias de la DANA
CULTURA
La directora de orquesta algecireña, aunque afincada en Viena, Irene Delgado-Jiménez, organiza otro apasionante encuentro musical en el espacio "sociocultural y desobediente" de La Revuerta, en el número 47 de la avenida Virgen del Carmen de Algeciras, el próximo 22 de diciembre a las siete de la tarde.
La charla lleva el original título de "Strauss y las fiestas analógicas". Explica Delgado-Jiménez que no podía desaprovechar las fechas navideñas para organizar un Café con Clásica de cara a una de las citas musicales del año: el Concierto de Año Nuevo de la Orquesta Filarmónica de Viena. La directora repasará en La Revuerta cuatro clásicos de Johann Strauss hijo, aunque introduce un spoiler: "¡No nos referimos a la Marcha Radetzky porque no la compuso él!".
"Es mucho más difícil escribir un hermoso vals que componer una sinfonía mediocre", decía Richard Strauss sobre la música de Johann Strauss. Sin embargo, una parte de la comunidad musical actual cree que este repertorio, base del Concierto de Año Nuevo, esta sobrevalorado. Este debate también saldrá a la palestra durante el encuentro de Café con Clásica del 22 de diciembre. La entrada es libre hasta completar el aforo.
"Y si ese día de toca la lotería, ¡ven a celebrarlo con música", bromea Irene Delgado-Díaz, creadora del proyecto Thalassa Music, que tiene por objetivo organizar talleres, charlas, mesas redondas y conciertos de alta calidad para romper las barreras entre los artistas y la sociedad. "El Campo de Gibraltar y Andalucía exportan cada vez más talento, hecho especialmente consumado en el mundo de la música clásica", asegura la directora de orquesta algecireña.
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