"Algeciras era una ciudad muy bulliciosa a finales de los 70, con mucha vida en las calles"
Entrevista | Abel Moreno, Medalla de Andalucía 2025
El onubense compuso algunos de grandes pasodobles, marchas e himnos durante su estancia en el Gobierno Militar algecireño entre 1976 y 1982
"Me dieron una medalla porque decían que había puesto de acuerdo a todos los alcaldes del Campo de Gibraltar", recuerda
Abel Moreno, reconocido compositor y autor del himno del Algeciras CF, galardonado con la Medalla de Andalucía

Abel Moreno es el padre de muchos de los pasodobles, marchas procesionales y militares o himnos con más solera de España, aunque su prolífica música ha trascendido fronteras. Muchas de las creaciones de este reconocido compositor nacido en la provincia de Huelva -en Encinasola en 1944- cobraron vida en Algeciras, entre 1976 y 1982, el periodo en el que Moreno echó raíces en la ciudad durante su estancia en el Gobierno Militar. A sus 80 años recuerda con lucidez absoluta aquellos "maravillosos años" y acaba de recibir uno de los reconocimientos que más ilusión le hacen en una trayectoria repleta de medallas: Moreno será galardonado con la Medalla de Andalucía de Ciencias Sociales y Letras 2025.
"Guardo muy buenos recuerdos de Algeciras y de su gente. Muchas de mis composiciones nacieron durante los años que estuve y mi hijo Abel nació allí, así que se puede decir que es un poco especial", relata Moreno, que tuvo una vinculación muy activa no solo con la ciudad, también con el resto del Campo de Gibraltar. Ahora reside en Sevilla.
El onubense dirigió la banda musical del Gobierno Militar, puso en marcha la Academia de Música de la Sociedad Algecireña de Fomento, la Orquesta de Cámara de Viento de Algeciras y la Academia Municipal de Música de San Roque, además de ejercer de profesor de innumerables alumnos y participar en composiciones musicales para casi todos los pueblos de la comarca. "Daba clases en los colegios de Montecalpe y Puertoblanco y ayudé a estudiantes de Ceuta que venían a examinarse a Algeciras, también de otros puntos del Campo de Gibraltar", rememora Moreno, que tuvo, entre otros, al algecireño Chico Valdivia. "Siempre le preguntaba, ¿quién conquistó el Perú?", recuerda con una sonrisa. La respuesta era otro Valdivia, el pontevedrés Pedro de Valdivia.
Abel Moreno ingresó en 1975 por oposición en el Cuerpo de Directores Músicos del Ejército y fue trasladado al año siguiente desde Zaragoza hasta el Gobierno Militar en Algeciras. "Recuerdo que cuando llegué vi un cartel que ponía 'Algeciras, ciudad con 100.000 habitantes'. Es decir, Algeciras ya era una ciudad grande en aquel entonces", remarca. Moreno hizo vida en la residencia militar, donde se rodeó de una buena camarilla de compañeros y amigos. "Tenía un buen grupo con los médicos y los veterinarios de la residencia", explica el compositor, que hizo buenas migas con Isidro Gómez, poeta, rapsoda y referente cultural de Los Barrios, fallecido en 1996 y reconocido en su localidad por dar nombre Casa de la Cultura de la Villa.
Cuando llegué de Zaragoza vi un cartel que ponía 'Algeciras, ciudad con 100.000 habitantes'
La Algeciras en la que vivió Abel Moreno tiene poco que ver con la actual. "Algeciras era una ciudad muy bulliciosa, sobre todo por la zona del mercado de Abastos, que era la que más me gustaba y la parte de la Iglesia del Carmen o la calle de Almacenes Mérida (la calle Tarifa). Los niños jugaban en la Plaza Alta. Había mucha vida en las calles, muchos conciertos y más cines".
El de Encinasola, un modesto pueblo de la sierra de Huelva, quedó prendado con aquella Algeciras de finales de los 70 y comienzos de los 80, donde hacía vida cotidiana principalmente en lo que ahora se denomina el barrio de la Caridad, toda esa zona que el Ayuntamiento lleva años intentando reflotar. El antiguo Hospital Militar de la calle Convento era otro de los puntos más frecuentados por el onubense y su esposa Mamen.
Uno de los hitos más recordados de Abel Moreno en la ciudad tiene que ver con el fútbol y con el Algeciras Club de Fútbol. "Yo soy muy futbolero. Iba al Mirador, qué bonito era ese estadio, aunque se embarcaban balones en el mar", bromea. "Un día pregunté por qué el Algeciras no tenía himno y dije 'pues aquí estoy yo para solucionar eso'. Le dije a Pepe Ojeda que escribiese una letra que yo me encargaba. Curiosamente el día que se inauguró el himno fue en un partido contra el Recreativo de Huelva en Segunda División y ese día ganó el Algeciras", repasa el compositor, que tararea al teléfono parte del histórico himno. Caprichos del destino, cuando el Algeciras CF celebró su centenario, Chico Valdivia compuso la música para la conmemoración. Nadie más indicado.
Entre las numerosas composiciones de Abel Moreno durante su estancia en Algeciras, el compositor rescata algunas que le vienen rápidamente a la cabeza: "El Padre Nuestro que abre La Madrugá de Sevilla fue una composición que hice para un funeral de un comandante asesinado por ETA. Un pasodoble para Paco Ojeda antes de una corrida suya en Algeciras. La primera marcha de gloria que compuse la hice en Algeciras, fue para la Patrona de mi pueblo, Nuestra Señora la Virgen de Flores. La marcha va a cumplir ahora su 50 aniversario".
Un día pregunté por qué el Algeciras no tenía himno y le dije a Pepe Ojeda que me escribiese la letra
Una de las anécdotas que saca una sonrisa a Moreno tiene que ver con los políticos: "Me dieron una medalla porque decían que había puesto a todos de acuerdo gracias a los pasodobles. En aquel momento, con la democracia recién llegada, cada localidad tenía a su alcalde con su orientación política, socialista, comunista, de Alianza Popular... Todos querían pasodobles para sus pueblos", relata.
Moreno cuenta con más de 150 marchas procesionales dedicadas a la Semana Santa y cerca de un centenar de pasodobles. Su reconocimiento traspasa fronteras. En Francia se le conoce como el Rey del Pasodoble, ya que la mayoría de los toreros tienen un pasodoble compuesto por él y la mayoría de los que se interpretan en las plazas de toros del vecino país son suyos. En Sudamérica se le conoce como El Torero de la Música.
"Yo me levanto, desayuno y me siento a componer. Antes lo hacía en el piano y ahora lo hago con el ordenador. Me pongo y se me va el tiempo hasta que mi mujer viene y me pregunta si vamos a comer. Para mí nunca ha sido un trabajo", reconoce.
Tras su etapa en Algeciras, Moreno fue destinado a Pamplona, a la División de Montaña, y posteriormente a Soria 9 en Sevilla y al Regimiento Inmemorial del Rey nº 1 en Madrid. Su periplo en la capital lo cubrió sin desplazar su residencia de Sevilla.
Abel Moreno tiene rotulada con su nombre una calle en Magallón (Zaragoza), Alcalá de Guadaíra (Sevilla) y Encinasola (Huelva), donde tiene el Museo de la Música, en el que se puede ver toda su vida músico-militar y artística, siendo a la vez el centro más completo de documentación de partituras antiguas y originales para banda. "Todo está allí en el museo, aconsejo su visita a quien tenga curiosidad o quiera conocer más de este pedacito de historia", recomienda.
Reconocimientos
Entre las condecoraciones militares que posee cabe destacar las de la Placa, Encomienda y Cruz de la Orden de San Hermenegildo, cinco Cruces al Mérito Militar, una al Mérito Naval, Cruz al Mérito de la Guardia Civil, Operador de Honor del Arma de Ingenieros y varias Menciones Honoríficas.
Entre las civiles, destacan la Medalla de la Cruz Roja, Premio a la Música de los Toros en Francia, Premio Ciudad de Sevilla, Premio Demófilo de la Fundación Machado, Saeta de Oro de la COPE, Medalla de la Sociedad General de Autores de Francia, Llave de Oro de la SGAE, Medalla del Congreso Europeo, Medalla de las Artes y la Cultura de la Ciudad de Huelva y Medalla de Oro de la provincia de Huelva, El Llamador de Canal Sur, Onubense del Año 2022, 'Alma de Andalucía' de Fecace, Premio de las Capas Pardas en Zamora, Premio taurino 'La escalera del éxito', Bandera de Andalucía en 2024.
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