El Ayuntamiento de Algeciras prepara la licencia de obras para la demolición del edificio Escalinata
Urbanismo dará un plazo de dos meses a la comunidad de propietarios para iniciar el derribo, pendiente desde 2007
La comunidad ya intentó en 2008 acometer el proyecto sin éxito
Los propietarios del edificio Escalinata negocian la demolición del bloque en paralelo a la del parking
Algeciras/Principio del fin para el edificio Escalinata. La Gerencia Municipal de Urbanismo del Ayuntamiento de Algeciras prevé conceder este miércoles la licencia de obras para la demolición del edificio Escalinata de Murillo, el bloque de viviendas contiguo al ya demolido parking Escalinata. El céntrico inmueble tuvo que ser desalojado hace más de veinte años por los daños estructurales provocados durante la construcción del aparcamiento. Fue declarado en ruinas en 2007 y desde entonces se encuentra pendiente de ser derribado.
El Consistorio tiene previsto emitir este miércoles la licencia de obras que concederá a la comunidad de propietarios un plazo de dos meses para iniciar las tareas, según ha avanzado este martes Radio Algeciras de la Cadena Ser y ha confirmado a Europa Sur el Ayuntamiento de Algeciras.
El parking Escalinata fue construido en altura, sin licencia de Urbanismo, por un acuerdo municipal de 2001, si bien en 2004 fue declarado ilegal por sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA). En su proceso de obras, el aparcamiento provocó daños irreparables en el edificio de viviendas Escalinata, cuyos inquilinos tuvieron que ser desalojados por riesgo de derrumbe. Como consecuencia de aquella ruina, los residentes del Escalinata cobraron una indemnización de 1,3 millones de euros para cubrir, entre otros conceptos, los costes de la demolición de las que fueron sus viviendas.
Los propietarios del edificio Escalinata llegaron a presentar un proyecto de demolición y solicitaron una licencia de obras en 2008. Esa actuación nunca llegó a ejecutarse y la cuestión no volvió a abordarse hasta 2017, cuando el Ayuntamiento emitió un decreto instando a los propietarios a "realizar las obras necesarias a fin de garantizar la seguridad de las personas y bienes, por el mal estado de conservación" del bloque.
La comunidad presentó entonces un escrito en el que declaraba su intención de derribarlo antes del 9 de febrero de 2018, pidiendo una ampliación del plazo establecido en ese decreto y anunciando que se seguiría el proyecto técnico ya presentado en 2008, además de ofrecerse a negociar una demolición conjunta con la del parking. Esta propuesta tampoco llegó a prosperar.
Ya en mayo de 2018, el Ayuntamiento y los vecinos desalojados alcanzaron un acuerdo para el pago de la indemnización pendiente y se volvía a incluir la necesidad de demoler el bloque, para lo cual se emplearía parte de la compensación pagada, valorada en 1,3 millones de euros.
El pasado septiembre, el Ayuntamiento de Algeciras comenzó a demoler la estructura del aparcamiento ilegal tras varios meses de actuaciones previas. En principio se planteó la posibilidad de ejecutar una demolición conjunta de ambas estructuras, si bien el proyecto del bloque de viviendas estaba pendiente de trámites ante el Colegio de Arquitectos. Ahora, solventadas las cuestiones burocráticas, y toda vez que la demolición del aparcamiento se encuentra en su recta final, próximamente comenzará el derribo del bloque, cuyos bajos y primeras plantas se encuentran tapiados desde hace años.
Durante la demolición será necesario abordar cuestiones como el acceso al aparcamiento del Edificio Plaza Alta, situado junto al Escalinata. El pasado septiembre, los vecinos del bloque ya preveían cuestiones como una posible inutilización temporal del acceso o la necesidad de apuntalarlo por seguridad.
Derribo del aparcamiento
El aparcamiento Escalinata ya es historia. La demolición del parking fue adjudicada por el Ayuntamiento de Algeciras a principios del pasado año para dar cumplimiento al mandato judicial que declaró ilegal el estacionamiento en 2004.
El proyecto de demolición encomendado a Plaza Sistemas se ha encargado de demoler el parking hasta, como límite máximo, la rasante original de la antigua plaza escalonada que existía antes de la construcción del aparcamiento. Las labores comenzaron en la segunda mitad de 2024, si bien tomaron ritmo a partir del pasado septiembre, cuando comenzó la demolición en sí tras la fase previa de retirada de materiales y otras estructuras.
Plaza Sistemas instaló 50 contrafuertes para apuntalar el edificio y un sistema de 20 sensores de última tecnología que permitieron monitorizar en tiempo real las posibles dilataciones del edificio y de todo su entorno.
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