El científico algecireño Darío Lupiáñez logra una beca de dos millones para un proyecto de investigación
El proyecto 3D-Revolution busca comprender cómo se determina el sexo en distintas especies para entender mejor los mecanismos moleculares que facilitan su evolución y adaptación
Ha logrado financiación europea y se desarrollará en Sevilla a partir de 2023
¿Cómo se determina el sexo de un individuo? Esa pregunta, que ha fascinado a la humanidad durante miles de años, es la que intenta responder el científico algecireño Darío Lupiáñez con un nuevo proyecto de investigación en el que aborda la determinación del sexo a partir de la organización tridimensional de los genomas. Un enfoque novedoso que acaba de recibir un importantísimo respaldo: una beca de dos millones de euros del Consejo Europeo de Investigación, que le permitirá desarrollarlo durante los próximos cinco años.
Según explica el investigador, "no ha sido hasta tiempos recientes cuando la genética ha permitido proporcionar una base molecular para este proceso". Hay muchas formas diferentes de determinar el sexo: "En mamíferos, como el ratón o los humanos, los machos tienen un cromosoma diferente que determina del sexo, el famoso cromosoma Y. Sin embargo, en las aves son las hembras las que portan el cromosoma determinante. En los anfibios, como las ranas, es más complicado ya que los cromosomas sexuales no están bien diferenciados. Y en casos más extremos, como las tortugas, el sexo puede ser determinado por factores ambientales como la temperatura". Esta variedad de sistemas demuestra que la determinación del sexo evoluciona rápidamente, "pero se desconoce cómo esto ocurre desde un punto de vista molecular. Comprender este proceso es de gran importancia ya que la evolución de la determinación del sexo esta íntimamente ligada a la capacidad adaptativa de las especies a cambios en su hábitat natural".
Lupiáñez abordará con su proyecto ese proceso desde una perspectiva novedosa: la organización tridimensional de los genomas. "Cada célula humana, con un tamaño 100 veces menor que el de una cabeza de alfiler, es capaz de almacenar en su interior hasta dos metros de ADN, la información genética clave para el desarrollo de los organismos vivos. Sin embargo, la forma en la que se empaqueta el ADN dentro del núcleo de la célula no ocurre al azar, sino que sigue unos patrones concretos, lo que se conoce como organización 3D del genoma". En investigaciones anteriores, el científico ha demostrado que alteraciones en la organización 3D del genoma pueden afectar su regulación, contribuyendo al desarrollo de ciertas enfermedades. "Sin embargo, estos cambios también pueden tener efectos positivos que contribuyen a la evolución de las especies, a una mejor adaptación a sus hábitats".
3D-Revolution permitirá ahora a su equipo realizar por primera vez un estudio a gran escala en el que se comparará la determinación sexual en especies en las que este proceso ocurre de manera diferente, "enfocándonos en entender su conexión con la organización 3D y regulación de sus genomas. Este proyecto nos ayudará a comprender mejor los mecanismos moleculares que facilitan la evolución y adaptación de las especies, además de proporcionar información sobre los componentes esenciales de la determinación del sexo, lo cual es de relevancia para el estudio de alteraciones del desarrollo sexual en humanos".
El estudio se hará en mamíferos, aves, anfibios y tortugas y se desarrollará durante cinco años. Para ello, Lupiáñez tendrá que reclutar un amplio equipo de investigadores, financiado fundamentalmente por el proyecto del ERC (por sus siglas en inglés). "Es muy ilusionante, ya que tenía preparado este ambicioso proyecto desde hace bastante tiempo, solo me faltaba la financiación".
Además, el científico va a poder desarrollar esta investigación más cerca de su tierra natal. En la actualidad dirige el grupo de investigación Epigenética y desarrollo sexual en el Instituto de Biología de Sistemas Médicos de Berlín, Centro Max Delbrück de Medicina Molecular. Pero en los próximos meses trasladará su grupo de investigación a Sevilla, al Centro Andaluz de Biología del Desarrollo, que forma parte del Consejo Superior de Investigaciones Científicas. Allí desarrollará 3D-Revolution.
Más de 600 millones para investigar en la UE
El Consejo Europeo de Investigación ha otorgado financiación en su convocatoria de consolidación a 313 proyectos de un total de 2.652 presentados. En total se repartirán 632 millones de euros.
De esos proyectos, 17 se han solicitado desde centros españoles, donde 11 investigadores y 6 investigadoras podrán consolidar sus grupos y liderar proyectos de investigación en la frontera de conocimiento a través de proyectos de 2 a 3 millones de euros. A ellos se sumaría el de Darío Lupiáñez, que en la concesión de las ayudas aparece el cupo alemán al trabajar en el Centro Max Delbrück (no obstante, la ayuda se concede al investigador, no al centro).
España es el cuarto país de la EU27 en número de ayudas con 35,74 millones de euros. La lista la encabezan Alemania y Reino Unido con 61 y 41 ayudas respectivamente. Hay más de 40 nacionalidades diferentes entre los investigadores beneficiarios.
También te puede interesar
Lo último