Cuenta atrás para el desalojo del edificio ocupado de la calle Cánovas del Castillo

Algeciras

La Policía Local identificará a los ocupantes y los propietarios de los vehículos antes de cerrar todos los accesos

Okupas en Cánovas del Castillo nº 8
Okupas en Cánovas del Castillo nº 8 / Erasmo Fenoy

Comienza la cuenta atrás para el esperado desalojo del edificio ocupado en la calle Cánovas del Castillo de Algeciras. Responsables de la Gerencia de Urbanismo, a través de su departamento de Disciplina Urbanística y de la Brigada de Obras, así como la Policía Local han determinado ya un plan de actuación para dar solución a los problemas que genera la ocupación, denunciados en numerosas ocasiones por los vecinos.

El edificio pertenecía a una promotora que entró en concurso de acreedores. Las puertas fueron tapiadas pero los okupas abrieron una de metal, que carece ahora de cerradura y por la que acceden al inmueble. El aspecto interior es desolador: basuras por doquier, puertas arrancadas de cuajo, cuartos de baños arrasados, cuadros eléctricos destrozados, montones de ropa usada, colchones viejos y malos olores.

Los vecinos de viviendas colindantes han denunciado a los okupas tanto por los ruidos que ocasionan como por las condiciones higiénico-sanitarias del inmueble. Una primera planta de su garaje se encuentra ocupada por vehículos, mientras que la segunda se ha inundado.

En esta ocasión será el propio Ayuntamiento quien actúe por ejecución subsidiaria, ya que se requiere agilidad en el proceso. En primer lugar, policías locales entrarán en el inmueble para proceder a la identificación de las personas que se encuentran en su interior, así como a los propietarios de los vehículos. A todos ellos se les informará sobre el próximo cierre de todos los accesos. En caso de que no fuera posible, se requerirá auxilio judicial, así como la actuación de la grúa para el desalojo de coches.

Casi de forma paralela se achicará el agua del aparcamiento y se tratará de buscar una solución para una evacuación permanente y evitar que vuelva a acumularse. El tercer paso será la limpieza y desescombro del interior, para acabar cerrando todos los accesos de forma segura, con traviesas soldadas.

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