Limpia de corrales: varios toros lidiados en Algeciras estuvieron de sobreros en otras plazas de España

Algeciras/Los taurinos utilizan la expresión "hacer limpieza de corrales" cuando se acaba con lo sobrante, es decir, aquella corrida (o feria) en la que se lidian los toros que nadie ha querido con anterioridad en otras plazas. Por supuesto, estos saldos ganaderos salen baratos a los empresarios ya que sus criadores están deseando quitarse de en medio a estos animales y así, de paso, ahorrarse su alimentación en la finca.

Al coso de Algeciras, gestionado por Carmelo García, han llegado varios de esos "restos", impropios para una plaza de segunda categoría, durante la actual Ferial Real. Ocurrió el pasado jueves durante la corrida concurso con ganaderías gaditanas. Uno de los toros, el de Fuente Ymbro, estuvo de sobrero en la feria de novilladas de Arnedo en septiembre del año pasado. Se trataba de Hechizo, número 216, que recorrió la friolera de 1.900 kilómetros desde la ganadería, ubicada en San José del Valle, y la plaza riojana, ida y vuelta.

Además del kilometraje, sobre Hechizo pesaba el manoseo de embarcarlo, desembarcarlo, pasar varios días en los corrales de Arnedo, volver a montarlo en el camión y regresarlo a la finca antes de que, el 27 de junio, fuera lidiado por David Galván en la plaza de Las Palomas. Así salió el animalito, que más que embestir, arrollaba y acudió al caballo al relance.

No es el único caso de limpia de corrales en la actual feria algecireña. Gavilano, el número 245 de Núñez del Cuvillo y que le tocó en suerte a Juan Ortega, estuvo cinco días antes, el domingo 23 de junio, de primer sobrero en Badajoz. En esta capital extremeña pesó 546 kilos y en Algeciras, 507 kilos, es decir, que en el trasiego el pobre Gavilano perdió 39 kilos y no regaló ni una sola embestida franca en Las Palomas.

Otro caso: el sobrero para rejones de Fermín Bohórquez en la corrida de este viernes, en la despedida de Pablo Hermoso de Mendoza, estuvo también de sobrero en Alicante hace dos domingos, el 16 de junio.

Como publicó Europa Sur en la crónica del 27 de junio, la Feria de Algeciras corre el riesgo de convertirse en un contenedor donde los ganaderos venden los "calcetines desparejados" de cada camada a bajo precio, lo que arruina cualquier posibilidad de espectáculo y defrauda a la afición del Campo de Gibraltar que acaba tragándose el saldo ganadero de media España.