Las madres y padres se concentrarán el martes contra las deficiencias del Virgen de la Esperanza
Algeciras
Grietas, falta de calefacción y falta de mantenimiento en los patios, principales reivindicaciones
Algeciras/Grietas en el enfoscado, falta de calefacción central y deficiencias en el patio. Esos son algunos de los problemas con que se encuentran diariamente el alumnado del centro de educación especial Virgen de Esperanza de Algeciras y que vienen siendo objeto de las protestas de la comunidad educativa del centro. En esta línea, la Asociación de Madres y Padres de Alumnos ha anunciado que se concentrará el próximo martes día 29, ante una situación que califican de insostenible y que afecta a la actividad educativa del centro.
CCOO ha instado a toda la comunidad educativa a participar en esta concentración en demanda de dichas mejoras en el centro, que tendrá lugar a las puertas de la Subdelegación de la Junta de Andalucía en la calle Ancha de Algeciras, el próximo martes 29 de enero, a las 11:00.
Desde el sindicato llevan advirtiendo de esta situación desde hace años, incluso llegaron a llevar a un técnico para que informase de posibles riesgos contra los usuarios y plantilla. De ese informe se confirmó que no existían riesgos inminentes ni estructurales, salvo el estado del cuadro eléctrico expuesto a humedades, única incidencia que corrigió la Administración.
No obstante, este sindicato sostiene que persisten las grietas en el enfoscado y deficiencias de mantenimiento sobre todo de los patios, así como el encontrarse sin calefacción en las aulas, siendo además un centro educativo para niños con necesidades especiales, con menor movilidad y más expuestos al enfriamiento corporal. El alumnado tiene que asistir a clase con varios polares y cubiertos con mantas. Tampoco pueden salir al exterior después de que la cornisa del patio se precipitara en el temporal del pasado mes de marzo.
CCOO recuerda que el centro presenta problemas de construcción desde su apertura, que dispone de una piscina cubierta para terapias que casi nunca funcionó por falta de personal y cuya caldera está estropeada. “Las ratas ya se han comido hasta el cable del motor”.
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