La Guardia Civil investiga la muerte de un algecireño de 32 años y su pareja en una vivienda en la localidad cordobesa de Montilla

El hombre, llamado Alejandro, y la mujer llevaban un mes de relación

La Guardia Civil acordona la calle Rafael Alberti, donde se han hallado los cadáveres.
La Guardia Civil acordona la calle Rafael Alberti, en Montilla, donde se han hallado los cadáveres. / Chema G. Mármol

Montilla/Conmoción en la localidad cordobesa de Montilla. La Guardia Civil investiga el hallazgo de dos cadáveres en el interior de una vivienda del municipio, un suceso que ha golpeado la localidad en la tarde de este jueves. Los fallecidos son una mujer natural de Montilla y su pareja, un hombre que residía en Algeciras y que se encontraba pasando unos días en el municipio cordobés. Los cuerpos han sido hallados en el interior de la vivienda de ella, en la calle Rafael Alberti.

La fallecida es Auxiliadora Ruz, de 42 años, han confirmado fuentes de la familia en el mismo lugar del suceso; su pareja, Alejandro, de 32 años, es el fallecido. Mantenían una relación sentimental desde hace un mes, aunque él vivía en la ciudad gaditana y ella en Montilla, informa El Día de Córdoba.

Ha sido la madre de ella quien, a primera hora de la tarde, ha encontrado los cadáveres. La Benemérita, que se ha hecho cargo del caso, ha mantenido acordonada la zona varias horas, hasta que una comisión judicial, pasadas las 21:00, ha concluido el levantamiento de los cadávares.

Los cuerpos han sido trasladados al Instituto Anatómico Forense de Córdoba, donde este viernes se espera practicarles las autopsias, que determinarán las causas concretas de las muertes y si existe alguna responsabilidad criminal.

La Guardia Civil ha omitido por el momento dar detalles del suceso, que se encuentra bajo secreto de sumario; oficialmente, la Comandancia ha confirmado el hallazgo de los cuerpos, a la espera de los resultados de los exámenes forenses.

La calle Rafael Alberti, en el barrio conocido popularmente como las 80 Viviendas, se ha mantenido toda la tarde precintada mientras los agentes de la Policía Científica y la Policía Judicial realizaban su trabajo en el interior del inmueble.

La zona se ha llenado de curiosos y las teorías sobre lo ocurrido se han multiplicado, aunque oficialmente no se ha apuntado a ninguna hipótesis.

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