El nuevo museo en la capilla del Cristo de la Alameda en Algeciras sufre palpables problemas de humedad al mes de su apertura
Las filtraciones de agua provocan desconchones y manchas en varias salas
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Algeciras/Apenas ha transcurrido un mes desde que la capilla del Santo Cristo de la Alameda reabriera sus puertas el pasado 2 de enero como museo, y las paredes del edificio ya muestran signos evidentes de deterioro. Filtraciones de agua, manchas de humedad, pintura desconchada y un ambiente cargado de humedad afectan especialmente a las salas 4 y 5 del recinto, donde se exponen reproducciones de las obras de la colección Antonio Viñas de Roa. A pesar de que estos problemas eran conocidos desde antes de la inauguración, el Ayuntamiento de Algeciras no ha adoptado una solución definitiva.
La situación no es nueva. De hecho, las humedades han sido una constante en este edificio histórico del siglo XVIII, ubicado sobre el antiguo cauce del río de la Miel, lo que lo convierte en un lugar especialmente vulnerable a filtraciones de agua. Ya en octubre de 2024, este periódico informó de que el Consistorio había aprobado un contrato menor para pintar el recinto debido a las patologías estructurales que presenta el inmueble. Esa intervención superficial ha resultado insuficiente.
Una solución temporal para un problema crónico
Consciente del riesgo que supone la humedad para las piezas de la exposición, el equipo de musealización decidió que los grabados, mapas y cartas náuticas de la colección no fueran originales, sino copias. Sin embargo, esta medida preventiva no exime de la necesidad de preservar adecuadamente el espacio. A pesar de los antecedentes de filtraciones, el museo no cuenta con higrómetros para medir la humedad ambiental, un instrumento básico en cualquier espacio expositivo de estas características.
Para intentar ralentizar el deterioro de las paredes, el personal del museo mantiene la calefacción encendida de manera constante. Sin embargo, esta solución casera no solo es insuficiente, sino que podría agravar el problema a largo plazo. La variación constante en los niveles de humedad y temperatura afecta no solo a las obras expuestas, sino también a la propia estructura del edificio, favoreciendo la aparición de moho y acelerando la degradación de los materiales.
El Ayuntamiento guarda silencio
Los responsables de la musealización del espacio han contactado con el Ayuntamiento de Algeciras para informar sobre los desperfectos y solicitar una intervención urgente. Hasta el momento, no han recibido ninguna respuesta. Europa Sur también ha tratado de obtener declaraciones de la Delegación de Cultura, pero sin éxito.
La urgencia con la que se inauguró el museo el pasado 2 de enero generó algunas críticas. El Consistorio necesitaba justificar la subvención europea con la que se financió la musealización, un total de 96.800 euros de los que el 80% eran Fondos Feder. La apertura se produjo justo a tiempo para cumplir con los plazos exigidos. Sin embargo, el retraso de un año en su rehabilitación ya hacía prever que los problemas estructurales del edificio no se habían resuelto de forma adecuada.
También se han suscitado críticas sobre la escasez de recursos destinados a la gestión del espacio. La capilla, que alberga una colección de gran valor histórico, solo abre en horario de mañana de lunes a sábado, una limitación que dificulta el acceso del público general.
El pasado lunes, el alcalde y su equipo de gobierno comparecieron casi al completo en la capilla para exponer el proyecto de presupuestos municipales de 2025.
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