El incendio en La Bajadilla se originó en una casa ocupada tras ser desmantelada como punto de drogas

Algeciras/Un incendio registrado este domingo por la tarde en una vivienda de la calle Huesca, en la barriada de La Bajadilla, en Algeciras, ha reavivado las preocupaciones de los vecinos sobre los problemas de seguridad y convivencia en la zona. El inmueble, utilizado como supermercado de drogas hasta su desmantelamiento por la Policía Nacional a comienzos de noviembre, pertenece a un individuo actualmente en prisión en la cárcel de Botafuegos, según han confirmado fuentes vecinales.

Tras las redadas policiales, la casa quedó vacía, pero vecinos de la barriada denuncian que desde entonces ha sido ocupada ilegalmente. A pesar de ello, en el momento del incendio, el domicilio se encontraba deshabitado, según el Consorcio de Bomberos de la Provincia de Cádiz. El fuego, cuyo origen aún se desconoce, provocó llamas que salían por una de las ventanas del primer piso cuando los efectivos de bomberos llegaron al lugar.

El incendio fue controlado antes de que afectara a la totalidad de la vivienda. Efectivos del Parque de Algeciras emplearon tres camiones autobomba urbana ligeros, especialmente indicados para zonas de difícil acceso como las calles estrechas y empinadas de La Bajadilla. Tras la extinción, realizaron labores de refresco debido a la gran cantidad de elementos inflamables acumulados en el inmueble, como basura, enseres y muebles, lo que aumentaba el riesgo de un posible rebrote.

El Consorcio de Bomberos destacó que no se registraron heridos y que el fuego no se propagó a otras viviendas cercanas, lo que evitó una situación más grave en este entorno densamente habitado.

Durante las labores de extinción, varios vecinos aprovecharon para trasladar a los agentes de la Policía Nacional y Local su preocupación por los problemas recurrentes asociados a esta vivienda. Según señalaron, la casa ha sido un foco de conflictos desde hace tiempo y su estado actual, sumado a la ocupación ilegal, representa un peligro para toda la barriada. “Si no se toman medidas, un día ocurrirá una tragedia”, alertó uno de los residentes.

La Policía Nacional ya había intervenido en esta vivienda en las redadas antidroga llevadas a cabo a principios de este mes, que se saldaron con una decena detenciones en el Cerro, la parte alta. Sin embargo, los vecinos lamentan que no se haya asegurado el inmueble tras el operativo, lo que ha facilitado su deterioro y ocupación.

Este incendio se produce apenas un mes después de que la Policía Nacional desarticulara un conocido clan criminal que controlaba el Cerro de La Bajadilla como punto negro del tráfico de drogas. La organización, estructurada como una empresa, gestionaba varios inmuebles en la barriada, distribuyendo funciones para almacenamiento, preparación y venta de estupefacientes, con actividad las 24 horas del día.

Uno de los episodios más graves relacionados con este grupo tuvo lugar el 15 de septiembre, cuando los miembros del clan provocaron un incendio intencionado en la vivienda de una familia rival, mientras sus ocupantes, incluidos cuatro menores, dormían en el interior. Afortunadamente, los residentes fueron rescatados a tiempo, pero el suceso puso de manifiesto la violencia con la que operaban en la zona.

Como avanzó entonces Europa Sur, las operaciones Ramad y Feriante, ejecutadas por la Policía Nacional, culminaron con la detención de diez personas, siete de las cuales han ingresado en prisión. Entre los inmuebles investigados figuraba una casa utilizada para custodiar el dinero obtenido del tráfico de drogas. En los registros, además de estupefacientes y 18.000 euros en efectivo, se incautaron armas blancas, una pistola táser y un arma de fuego.

La vivienda incendiada este domingo en la calle Huesca estaba vinculada a este entramado.