... ¿Victoria segura?

La Real Balompédica Linense despide 2019 en un estadio, el Iberoamericano de San Fernando, con el que tiene un idilio muy señalado. Los albinegros estrenan entrenador, Antonio Calderón, quien relevó a última hora del lunes a Jordi Roger, después de que su equipo hubiese perdido ante el Córdoba en el Municipal y sumado dos triunfos en trece jornadas. El preparador recupera a los sancionados Dopi -aunque algo renqueante- y Álvaro Vega y completa una lista con 18 jugadores de la primera plantilla, un hecho sin precedentes en la última etapa de su predecesor. La alineación es una incógnita.

Día señalado para la Balona. Mientras la opinión pública trata de digerir que el estadio se cae [literalmente] a pedazos después de que este viernes se desplomase una de las torretas de iluminación artificial, la plantilla se prepara para poner rumbo a San Fernando, donde debutará Antonio Calderón, quien desde su llegada se esfuerza en transmitir la sensación de que lo tiene todo bajo control.

El escenario se antoja ideal. No hay que olvidar que en 2017 la Balompédica festejó sobre ese césped una agónica permanencia y que hace apenas dos meses superó una eliminatoria de la Copa Federación.

Para ese duelo entre dos equipos que se asomaron a la cabeza y que ahora no están en su mejor momento, la Balompédica cuenta, por fin, con 18 jugadores de la primera plantilla. Los únicos ausentes son los tres convalecientes de sus respectivas lesiones: Javi Forján, Luis Alcalde e Igor Martínez.

En la alineación, pocas pistas, aunque da la impresión de que, al menos hasta que disfrute de unos días durante el parón para retocar el equipo de acuerdo a sus ideas, tampoco es que Calderón vaya a realizar una metamorfosis total.

“Estoy muy satisfecho del comportamiento de la plantilla y de cómo me han acogido en la ciudad”, recalcó el técnico gaditano en su primera comparecencia prepartido.

“He recibido muchas muestras de cariño por parte de la afición, lo que te hace sentir como en casa y el trabajo de los futbolistas también ha sido muy bueno, han tenido muy buena actitud, con ganas de apretar un poquito más si cabe el acelerador y limar esos pequeños detalles que nos permitan conseguir más puntos”, agregó.

“Anímicamente la plantilla está bien, está responsabilizada y con un poquito de rabia, porque los futbolistas han venido para estar mejor situados, pero en cuanto a ánimo y confianza están bastante bien”, abundó el nuevo míster albinegro.

Con respecto al rival, señaló: “El San Fernando es un equipo que todo el mundo sabe que esta temporada apostó muy fuerte, empezó bien, muy bien, pero es cierto que en los últimos partidos no está cosechando los resultados que le gustaría”.

“ Eso no quita que sea un equipo fiable, bastante sólido cuando tiene el balón, muy peligroso al contragolpe y que basa su juego en las bandas”, añadió.

“El hecho de que lleve cuatro partidos sin una victoria debe ser tenido en cuenta porque es posible que si nosotros hacemos las cosas bien les pueda pesar, pero tampoco hay que obviar que en cualquiera de esos cuatro partidos en los que no han ganado han podido hacerlo”, concluyó.