Sierra Leona-Benin: ¿con quién van los balonos?

La selección nacional de Sierra Leona disputa este lunes (18:00) ante Benin el decisivo encuentro de la sexta jornada de la fase de clasificación en la que ambos combinados se juegan el pasaporte para la Copa de África. En la convocatoria del conjunto de casa están dos jugadores de la Real Balompédica Linense,los hermanos Alhassan y Alusine Koroma. El debate está servido. ¿Qué prefieren los aficionados balonos? Por un lado está el orgullo de que la entidad esté representada por primera vez en la fase final de un torneo internacional. Por otro, que la competición se juega en Camerún entre el nueve de enero y el seis de febrero… lo que dejaría al conjunto de Antonio Ruiz RomeritoRomeritosin sus futbolistas durante aproximadamente un mes.

La presencia en su selección absoluta de Alhassan y Alusine Koroma -cuyos contratos con el equipo de La Línea fueron recientemente ampliados hasta 2024- tiene muchas connotaciones sorprendentes. Aunque algún caso aislado esté en la memoria de todos los buenos aficionados (Willy y René Van de Kerkhof con Holanda en los años 70-80 del siglo pasado), no es nada frecuente que dos hermanos formen parte de una selección y mucho menos aún que ambos militen en el mismo club. Aún más llamativa es la convocatoria de Alusine, que juega habitualmente… en la séptima categoría del escalafón nacional.

Lo cierto es que Sierra Leona obtendrá una clasificación que sería histórica en caso de vencer a Benin este lunes. No le vale otro resultado. El encuentro se juega ahora después de ser suspendido el pasado mes de marzo al informarse de que cinco jugadores de Benin habían dado positivo por Covid-19 y en medio de una aguda polémica y dudas, por parte del propio Benin, sobre la veracidad de los test realizados horas antes del encuentro.

La victoria de Sierra Leona supondría que los dos jugadores balonos se marcharían a su país cuando se pare en Navidad la competición en la Primera RFEF… y ya no volverían hasta que su selección fuese eliminada.

No se trata precisamente de un problema nuevo. En la última edición disputada, la que se celebró en Gabón en 2019, fueron nada menos que 19 jugadores (diez de LaLiga Santander, ocho de LaLiga 1|2|3 y uno de Tercera división) los que abandonaron a sus clubes. En la edición precedente la cifra se elevó a 26. Y además eso sucede en un momento que, con la disputa de la Copa del Rey de por medio, suele resultar determinante en la marcha de la temporada.

Los equipos de Segunda que acceden al play-off también suelen verse desprovistos de futbolistas importantes al coincidir la fase de ascenso con una de las ventanas de partidos internacionales.