Josema, Samu y Javi Méndez, los elegidos para la pretemporada de la Balona
Real Balompédica Linense
Los tres canteranos se sumarán al trabajo del primer equipo tras la concentración en Marbella
El defensa central José Manuel Bos Josema, el centrocampista Samuel Fernández Samu y el atacante, aún en edad cadete, Javi Méndez, son los tres canteranos elegidos por el cuerpo técnico de la Real Balompédica Linense para completar la pretemporada con el primer equipo, si bien se sumarán al trabajo que comanda Antonio Calderón una vez la primera plantilla regrese de la concentración que llevará a cabo entre los días 16 y 23 en el Marbella Football Centre de San Pedro de Alcántara (Málaga).
Son, sin duda, tres de los jugadores con un futuro más prometedor de la cantera linense, aunque no los únicos. Josema y Samu, jugadores del filial que Juan Mari Sánchez dirigirá el próximo curso del Segunda Andaluza, son más una apuesta de presente. El caso del cadete Javi Méndez es, obviamente, diferente. Su convocatoria la hace el club pensando en que vaya creciendo como futbolista en la estructura de un conjunto de la Segunda división B para cuando llegue el momento de incrustarse en una plantilla profesional. De hecho, tras la pretemporada regresa a su equipo, el Atlético Zabal.
Josema, que ya la pasada campaña empezó a entrenarse con el primer equipo a las órdenes de Jordi Roger, es un central formado, también, en el conjunto zabalista que destaca, por encima de sus innumerables virtudes por las ganas que tiene no ya de ser futbolista, sino de serlo de la Real Balompédica. Un punto a su favor.
Samu, un mediocampista que se adapta a la mediapunta cuando es menester, llegó a formar parte de una convocatoria la temporada pasada, después de haber tomado parte en varios partidos durante el verano. A finales de noviembre Jordi Roger le reclutó en medio de una plaga de bajas y siguió el partido con el Cádiz B desde el banquillo.
Javi Méndez está viviendo un sueño. Es aún literalmente un niño y ya empezará su formación de cara al fútbol profesional. Lo hará justo un año después de que una lesión ósea amenazase con alejarle del balompié. Sus ganas de fútbol han bastado para que aquello haya pasado a ser solo un mal recuerdo.
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