Fernández Rivadulla: "Estoy súper orgulloso de mis jugadores"
Real Balompédica - San Roque de Lepe | Entrenadores
"Salvamos un punto y hay que darlo por bueno, con diez no bajamos los brazos", afirma el preparador de la Balona
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Antonio Fernández Rivadulla, entrenador de la Real Balompédica Linense, se confesó este domingo "súper orgulloso" de sus jugadores después del empate a un tanto que el equipo albinegro firmó con el San Roque de Lepe en el Ciudad de La Línea (1-1).
"Creo que fue un partido con muchos altibajos en cuanto a emociones. Hay que estar súper orgulloso del equipo, yo lo estoy", dijo el míster en su comparecencia de prensa.
"Vi a una Balona que quiso, que se quedó a la media hora con uno menos y no sólo bajó los brazos, sino que empató un partido y partiendo de una defensa ordenada, intentó buscar una acción que nos diera la victoria", narró.
"Creo que nadie puede achacar nada a mis futbolistas, en absoluto. El equipo se ha desfondado, defendió con orden diez contra once, pero no pudo ser, aunque salvamos un punto y hay que darlo por bueno, dadas las circunstancias que se dieron en los últimos minutos", abundó.
"A los jugadores en el vestuario les dije que este es el camino a seguir. No han cedido ni un solo balón jugando con diez. No tengo palabras. He visto a los jugadores con la cabeza gacha y mi trabajo como entrenador es subirles la moral y demostrarles que han hecho un gran partido. Después de mucho tiempo con uno menos igualamos el resultado y lo mantuvimos durante más de 70 minutos. Eso es muy difícil, y no sólo eso, al final estuvimos a punto de llevarnos los tres puntos".
"Empezamos con el 3-4-3 que habíamos trabajado toda la semana, pero tuvimos dificultades y ya lo dije en mi presentación: si tenemos que modificar, lo hacemos. Adelantamos la posición de Sergi [Monteverde] y formó un doble pivote con Javi Pérez. Pasamos a un 4-2-3-1 y estuvimos mucho mejor. Entonces llegó la expulsión y nos quedado con un 4-1-4-1. Ellos metieron más gente arriba, más rematadores y me vi en la necesidad de sacar a Morcillo. Acabamos con un 3-4-2 con dos delanteros como Aridane y Copete, antes Frank Garbiá, y los contuvimos bastante bien".
"Otra cosa que creo que es muy importante y alentadora, es que con uno menos defendimos muy bien el balón, algo que era un talón de Aquiles del equipo", recordó. "Hay que ser humildes, trabajadores, no tener prisa y después estar acertados, porque el gol de Fran [Carbià] es un golazo, un gran centro de Cera cuando nadie contaba con esa jugada".
"Era el típico partido que era fácil que te golearan en casa", sostuvo en su comparecencia postpartido. "Si te desordenas, si no tienes las líneas juntas y ajustas donde tienes que ajustar podíamos haber perdido. Pero no sólo no ocurre eso sino que empatamos un partido muy difícil y con uno menos, acabamos en área contraria. El aficionado tiene que darse cuenta de que el equipo se ha vaciado, lo ha dado todo".
"Nuestra misión era intentar revertir esa situación, darle alegría a la afición. Pero no sólo alegría por el resultado, sino también alegría por el juego", explicó. "Ésa fue nuestra idea. No se pudo reflejar por las circunstancias que se dieron, pero sigo diciendo lo mismo. La Balona tiene una gran afición. Nuestra misión al final de la temporada es lograr nuestros objetivos".
"Veremos hasta dónde podemos llegar y recuperaremos ese espíritu de equipo. Sé que será complicado, quedan pocos partidos, pero pido a la afición que tengan paciencia. Tenemos que estar unidos desde final de temporada. Sólo pido eso. Que estamos unidos. Que del último partido de mayo, final de temporada, saquemos conclusiones", finalizó.
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