El Villarrobledo llega a La Línea como el peor viajero de toda la Segunda B
Real Balompédica Linense
El conjunto albaceteño suma un punto en diez desplazamientos
El entrenador, Castellanos, no duda en confesarse "un balono más"
El CP Villarrobledo llega este domingo (12:00) a La Línea con la vitola de ser no ya el peor viajero del grupo IV, sino el de toda la Segunda B. Los que dirige Jesús Castellanos han logrado un punto (en Mérida, el pasado 15 de diciembre) en diez desplazamientos. La semana ha sido movida en el seno de la entidad, ya que despidió al chino Mu Shantao, que estaba cedido y que ha pasado casi desapercibido, pero ocupó su licencia con el camerunés Dani Ndi, que llevaba semanas entrenándose con sus compañeros y que al menos entrará en la convocatoria para el partido en el Municipal.
Dos puntos separan al Villarrobledo, que prácticamente mantiene la plantilla con la que ascendió el pasado verano desde Tercera, de los puestos de salvación. Una proeza para un equipo que finalizó la primera vuelta con un punto como visitante, apenas cinco goles en sus desplazamientos y después de haber encajado nada menos que 17.
El equipo albaceteño afronta el encuentro en La Línea, además de la ya comentada marcha de Mu Shantao (que apenas había disputado 32 minutos de Liga), con las ausencias de su referente ofensivo, Nacho Huertas, y de José Carlos, ambos bajas de larga duración, que van a quedarse sin licencia para lo que resta de temporada. Tampoco viaja Manolo Molina, sancionado.
Por el contrario vuelve a la convocatoria su mejor artillero, Agus Alonso, autor de siete dianas, que no pudo disputar el encuentro de la pasada jornada en Sanlúcar.
El técnico, Jesús Castellanos no tiene reparos en admitir que se siente “un balono más” desde que vistió los colores de la Balompédica en la campaña 1999/2000.
“Nosotros estamos muy vivos, muy cerca de la permanencia, pero está claro que tenemos que mejorar en defensa, estamos encajando muchísimos goles”, lamenta el míster. “Vamos a seguir haciendo hincapié en ese apartado en el trabajo diario, porque debemos ser un equipo que no solo gane o pierda, sino que empate más, incluso cuando no juguemos bien, que es algo que nos está costando”.
Con respecto a la Balona, dice: “El cambio de entrenador es un síntoma de cuál son sus pretensiones, porque a poco que ha tenido una mala racha ha decidido destituir a Jordi Roger”.
“Está claro que la Balona quiere meterse arriba, porque tiene una plantilla que lo puede hacer”, abunda. “La propuesta ha cambiado un poquito porque Antonio Calderón ha metido su identidad, pero es un equipo con recursos y jugadores para aspirar a todo”.
“A nosotros nos queda intentar ponérselo difícil y es lógico que quiera ganar allí, pero después le deseo lo mejor, porque no dejo de ser un balono más y ojalá logre los más ambiciosos objetivos", finalia.
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