Almería B-Balona: el regreso más señalado para Miguel Rivera

El próximo domingo, ocho de septiembre (12:00), se disputa el Almería B-Real Balompédica del grupo IV de Segunda Federación. El técnico balono, el malagueño Miguel Rivera, regresa a una de las innumerables plazas en las que ejerció su profesión. En su caso, dado su extenso palmarés, eso casi no sería noticia si no fuese porque fue en la capital indálica donde debutó tanto en Primera como en Segunda división, durante la etapa en la que estuvo precisamente al frente del filial, es decir, del que ahora se presenta como su próximo rival.

El ahora entrenador de la Balona llegó al filial de la UD Almería 20 de enero de 2014 como relevo de Juan Carlos Cintas. La situación del segundo equipo era extremadamente delicada, pero el malagueño consiguió reconducir la situación y llevar a su equipo a una casi heroica permanencia en la ya extinta Segunda división B.

En el ejercicio 2014-2015, Miguel Rivera llevó al Almería B a la promoción de ascenso a la Liga Adelante tras una espectacular campaña en la que varios jugadores llegaron a tener presencia habitual en el primer equipo. Vaya, que cumplió todos los objetivos.

En diciembre de 2014 la UD Almería destituyó a Francisco y entregó las riendas del primer equipo, de manera interina, a Miguel Rivera. El viernes 12 del último mes de aquel año dirigió desde el banquillo al equipo de casa ante el Real Madrid (1-4) con goles de Verza para los de casa -que fallaron un penalti con el 1-2- e Isco, Cristiano Ronaldo (2) y Gareth Bale para los blancos. En el banquillo rival se sentó un tal Carlo Ancelotti.

“No quería irme de este cuento de Cenicienta sin haberlo intentado”, dijo en rueda de prensa, horas antes del volver al filial y de que Juan Ignacio Martínez fuese anunciado como el nuevo conductor de la primera plantilla.

La 2015-2016 fue bastante más traumática para el ahora preparador del equipo de La Línea. El seis de octubre de 2015 el destituido fue Sergi Barjuán. Rivera ocupó el cargo durante dos semanas con el Almería, como ahora en Segunda división. Debutó en Montilivi con un empate ante el Girona (1-1) y una semana después volvió a ejercer en el duelo ante el Elche (2-3) del 18 de octubre de 2015.

El lunes siguiente regresó al filial, del que fue despedido tras la última jornada de aquel año natural, en la que el 'B', que era colista del grupo IV de Segunda B, cosechó ante el Betis B una derrota (3-1) que suponía la décima jornada sin ganar, periodo en el que solo había conseguido un punto.

"Una de las etapas más importantes de mi vida profesional"

“Volver a Almería me produce una sensación súper agradable, porque me trataron más como un familiar que como un entrenador", recalca Rivera. "Mantengo muchas amistades allí, tuve muy buenos compañeros y desde la humildad entiendo que dejamos allí muy buenas sensaciones”.

“Es una de las etapas más importantes en mi vida profesional, porque debuté en Primera y Segunda división, así que lo valoro como un periodo extraordinario”, recuerda.

“Llegamos para salvar un filial cuyo descenso parecía garantizado y pudimos revertir la situación, después hicimos una plantilla con mucha gente joven que jugó la fase de ascenso a Segunda A y muchos futbolistas se proyectaron a categorías superiores, incluso a Primera”, abunda.

“En definitiva son todo recuerdos gratísimos de mi etapa en Almería, donde con proyectos muy humildes en los que de la mano de Alfonso García y de su hijo, de Andrés Fernández Carbajo, Angel Luis Catalina [ex jugador de la UD Los Barrios]... hicimos un trabajo que nos permitió disfrutar muchísimo”.

“Insisto, volver allí va a ser gratísimo a título personal, le deseo lo mejor a esa institución, pero ahora mismo defiendo con toda la pasión e ilusión el proyecto de la Real Balompédica Linense y vamos a tratar de hacer el mejor partido para tratar de regresar con la victoria”, advierte para finalizar.