La Balona le vacila a los bacilos (0-1)

Atlético Antoniano - Real Balompédica Linense | La crónica

Los albinegros se sobreponen a la gripe y profanan el campo del Antoniano, que no perdía en casa desde noviembre del 2023

Los linenses suman ya cinco victorias en seis jornadas, dos fuera de casa consecutivas sin encajar

Álex Hernández anota el tanto visitante de penalti y Álex Lázaro detiene otro penalti minutos después

Brillante debut de Luis Martínez; Toni Jou y Fran Tena tampoco desentonan

El gol de la victoria de la Balona en Lebrija
J.S.Ch.

12 de enero 2025 - 18:02

La Real Balompédica Linense se constituye oficialmente en la destrozarecórds del grupo IV de la Segunda Federación. Acabó 2024 echando por tierra la racha de seis victorias y 600 minutos sin encajar un gol de La Unión Atlético y empieza 2025 pulverizando una marca de catorce meses sin perder en casa del Atlético Antoniano. Un gol de penalti transformado por Álex Hernández y una pena máxima, a renglón seguido, detenido por Álex Lázaro resultaron determinantes en el triunfo (0-1) en el Municipal de Lebrija de una Balona que saltó al campo en la plaza de promoción y duerme ahora acomodada en la zona media de tabla y a la vista de su trayectoria, mirando más hacia arriba que hacia abajo.

Javi Moreno ha convertido a esta Balona en un equipo camaleónico, capaz de reinventarse una y otra vez, de superar a base de amor propio y orden cualquier adversidad. Esta vez tocó el brote de gripe que se ha hecho sitio en la caseta. Se quedaron en La Linea Jack Harper y Carlos León y viajaron algunos como David Pecellín o David Hernández que estaban para haber permanecido en cama. Todo eso, con Connor Ruane y Ale Palanca fuera de servicio por lesiones de larga duración.

Esta situación dio pie a un once como poco peculiar. Sergio Chica tuvo que ser el improvisado lateral derecho. Luis Martínez se estrenó en el centro de la retaguardia apenas 48 horas después de vincularse a la entidad junto a Moha Hamdoune y Fran Moreno se acomodó otra vez al lateral zurdo, con un papel brillante por cierto. Es decir, la retaguardia estaba formada por cuatro centrales. Intachable los cuatro, como lo estuvieron todos en el apartado defensivo (con mención especial también para Carlos Cano) en esa nueva versión solidaria que ahora exhiben los albinegros. En lo que se refiere a tener el balón, Fran Carbià volvió a demostrar que es el que más sabe de eso dentro de la caseta. Nada nuevo.

Luis Martínez, en un momento del encuentro
Luis Martínez, en un momento del encuentro / joselefotografia

Un apartado aparte merecen las tres incorporaciones del mercado de invierno, cada uno con un protagonismo diferente en cuanto a minutos, pero todos con una actitud encomiable. Aunque lo sensato es esperar un poco más para dictar sentencia, a primera vista da la sensación de que los tres (Fran Tena, Luis Martínez y Toni Jou) sabían donde venían. Y que la Balona era conocedora de a quien incorporaba. Ojo al partidazo de Luis Martínez en un escenario que exige mucho a la posición de central. Con maneras de jugador de superior categoría.

Dos penaltis

La Balompédica logró estos tres valiosísimos puntos, no solo por lo que suponen en la clasificación sino porque respaldan una filosofía de juego, porque supo adaptarse a un partido complicado. Acabó por hacer beber al Antoniano su propia pócima. Trabajo, orden, esfuerzo solidario, disciplina y un fútbol expeditivo cuando lo requería la situación. El equipo de La Línea consiguió que el Antoniano nunca se sintiese cómodo en el campo.

Los de Lebrija empujaron fuerte al principio, como es característico en ellos. Pero poco a poco la Balompédica fue equilibrando las fuerzas hasta que en el minuto diecinueve una mano dentro del área le brindaba la posibilidad de ponerse por delante en el marcador. Álex Hernández tomó el esférico con una decisión incontestable, desoyendo la oferta de alguno de sus compañeros para lanzar la pena máxima. El tinerfeño no falló.

La escuadra de La Línea había llevado el partido donde quería. Pero, como era de esperar, el Antoniano reaccionó al 0-1 como un león herido. Y en esa sacudida el árbitro se cobró otro penalti (que, como el primero, dio la sensación de existir). Lanzó Mike Cevallos y Álex Lázaro respondió con un paradón. En la continuidad de la jugada el algecireño Alberto Fuentes incluso pudo cometer una tercera pena máxima, pero el extremeño Pablo Asensio debió pensar que ya era mucha tela para veintitantos minutos de partido. A mentra de anécdota, ese colegiado ha pitado los dos Balona-Antoniano de esta liga y en ambos se ha impuesto el conjunto linense por la mínima y con un gol de penalti.

Los jugadores de la Balona festejan el tanto de Álex Hernández
Los jugadores de la Balona festejan el tanto de Álex Hernández / joselefotografia

A partir de ahí la Balona, que jugaba a favor del fuerte viento, supo cuál era su papel: defenderse con orden y buscar una contra. La realidad es que en lo que faltaba de primer tiempo fueron los albinegros (que repetían la vestimenta rosa que tanta fortuna les está dando) los que tuvieron más acercamientos y con más peligro.

Los cinco saques de esquina que los visitantes botaron en la primera mitad dan fe sus numerosos acercamientos a la zona de definición Aunque, paradójicamente, cuando más cerca estuvo el 0-2 fue en un saque largo del meta Álex Lázaro cuyo bote se le atragantó a Diego Barrios, aunque el meta marteño acertó a corregir y enviar a córner.

La segunda mitad

Tras el intermedio Diego Galiano introdujo dos cambios y modificó el dibujo del conjunto nebrisense, que era el que ahora jugaba con el viento empujando sus acciones ofensivas. Pero nada. El imbatible Antoniano se chocó con una Balona hercúlea, sacrificada a más no poder, que supo sufrir. Eso que el tópico llama ponerse el mono de trabajo.

En un campo como ése, con el público apretando tela detrás de una de las porterías y con el equipo de casa por detrás estaba escrito que los segundos cuarenta y cinco minutos se iban a desarrollar casi siempre en campo visitante. Y es verdad que a base de pelotazos y de buscar segunda jugadas los de Lebrija apretaron, pero quitando dos o tres acciones aisladas, se impuso la defensa de la Balona. Y cuando no, ahí estuvo su portero, que sigue elevando el nivel de sus actuaciones. En el 89’ sacó Álex Lázaro un centro envenenado de Nacho que parecía querer convertirse en la igualada.

No hubo para más. La Balona logró su quinta victoria en seis jornadas, la segunda consecutiva en dos desplazamientos, en los que ha dejado su portería a cero. Para satisfacción de los más de cien hinchas que le acompañaron y para los que se quedaron en casa. Aunque aún queda mucho camino por andar, ya es lícito hacer números para el sueño. Si lo hizo el Orihuela el curso pasado...

Ficha técnica

Atlético Antoniano (0) Diego Barrios; Néstor (Guti, 79'), Fromsa, Guille Campos, Carlos Cobo (Nacho, 79'); Javi Rodríguez (Óscar Jiménez, 65'), Juanfran (Adri Peral, 46'), João Paulo, José Mari (Ayán. 46'); Jaime Lópezy Mike Cevallos

Real Balompédica Linense (1): Ález Lázaro, Moha Hamdoune, Luis Martínez, Sergio Chica, Fran Moreno; Adri Carrasco (David Hernández, 86'), Álex Hernández (José Antonio, 86'), Carlos Cano, Alberto Fuentes (Fran Tena, 76'); Fran Carbià (Toni Jou, 65') y João Pedro (David Pecellín, 65').

Árbitro: Pablo Asensio Pérez (Burguillos del Cerro -Badajoz-). Especialmente en el reparto de tarjetas, con tintes caserillos.

Tarjetas: Amarillas a los visitantes Moha Hamdoune (30'), João Pedro (32'), Fran Moreno (36'), Toni Jou (83').

Gol: 0-1, Álex Hernández, de penalti (19').

Incidencias: Encuentro de la decimoctava jornada del grupo IV de la Segunda Federación, primera de la segunda vuelta, disputado en el Municipal de Lebrija (Sevilla), sobre césped sintético. Un centenar de aficionados de La Línea en las gradas.

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