La Balona vuelve a Torremolinos 42 años y tres meses después de su última visita

La Real Balompédica Linense visita este domingo nueve de marzo (12:00) en El Pozuelo al Juventud de Torremolinos. Un hecho que no se produce desde el 28 de noviembre de 1982. Es decir, cuando los equipos salten al terreno de juego habrán transcurrido la friolera de 42 años, 3 meses, y 20 días. Los albinegros, que acabaron protagonizando su primer ascenso a Segunda B en el estadio Ipurúa de Éibar, vencieron 1-2. Los locales acabaron la temporada en una cómoda octava posición.

Aquella temporada 1982-83, en la que el entonces presidente Samuel Fernández consiguió que la Balompédica jugase de prestado en el grupo IX de Tercera fue un paseo para los que primero entrenó Quimet Carreras y luego Jaco Zafrani. De hecho, su primera derrota no llegó hasta la jornada 30, en Estepona.

En la decimotercera fecha del calendario y acompañado por una multitud la Balona visitaba al Juventud de Torremolinos, un duelo en el que no podía contar ni con Diego Tinajero (tristemente noticia este viernes como consecuencia de su fallecimiento) ni Ángel Villar, ambos lesionado. Defendió el marco Helenio Fernández, uno de los fundadores de La Línea 100x100, que debutaba en aquella ocasión con el primer equipo. Tampoco era de la partida el añorado Ramón Bancalero, al que unos problemas físicos mantenían fuera de la convocatoria por séptima semana consecutiva.

El melillense Domenech Sevilla, muy discutido por los visitantes, arbitró un partido en el que la Balona alineó a: Helenio; Pirri, Antonio Bautista, Caro, Lorenzo; Alberto Torremocha (Garrido), Vicente Borrell, Noly (Iñaki), Paquito; Argimiro Márquez y Juan Manuel Quirós.

Los locales formaron con: Max; Zambrana, Angelillo, Eduardo, Blanco; Cazorla, Escalona, Tejada, Vicente; Acosta (Velasco), y Fran- cis (Paniagua).

Juan Manuel Quirós (‘8’) de penalti, Iñaki (62’) y el local Vicente (91’) pusieron la firma a los goles.

“El partido se celebró a las doce de la mañana, declarado día del club, y con entrada única de 600 pesetas, muy por encima del valor normal de las localidades de El Pozuelo, lo que originó un conflicto, negándose varios aficionados visitantes a entrar en el estadio”, escribía en el apartado de incidencias Paco Villalta en Diario de Cádiz, el periódico Decano del Grupo Joly, al que también pertenece Europa Sur. “Lució un sol espléndido. El terreno de juego en muy malas condiciones, de barro y duro y con montículos”.

"Desde los primeros minutos del encuentro, sólo un equipo sobre el terreno de juego, la Real Balompédica Linense, que demostró neta superioridad ante un Juventud de Torremolinos que sólo supo practicar un juego bronco y falto de ideas”, decía la crónica.

“El juego duro de los de Torremolinos fue merecedor de mayor energía por parte del árbitro, que perdió un tanto los papeles. Quirós se erigió en verdadera pesadilla para los defensores locales y, aunque la Balona no hizo un gran partido, jugó sin embargo en un claro 4-3-3, encerrando a los malagueños en su propio terreno. Es de destacar la buena labor del joven Pirri y del central Caro”, añade la reseña, que habla de “un semifallo” de Helenio “que debió salir” en el tanto local.