Un grupo de hinchas radicales invade el vestuario de la Balona en Estepona

CD Estepona - Real Balompédica Linense

La intervención de Carlos Guerra y Joaquín Jiménez impide que el conflicto degenere

(4-0) Balona: cerrado por defunción

Futbolistas de la Balona escuchan los reproches de sus aficionados nada más terminar el encuentro, antes del incidente con los ultras
Futbolistas de la Balona escuchan los reproches de sus aficionados nada más terminar el encuentro, antes del incidente con los ultras / Vanessa Pérez

Un grupo de hinchas radicales de la Real Balompédica Linense accedió al vestuario del equipo albinegro al término del encuentro que el conjunto de La Línea disputó en la mañana de este domingo en el campo San Fernando de Estepona y que se saldó con victoria del equipo local por 4-0.

Los aficionados visitantes, visiblemente exaltados, entraron al vestuario por la puerta trasera del mismo, que da directamente a la calle y que se encontraba abierta. Los hinchas trataban a voz en grito de reprochar su conducta a los jugadores. La situación no llegó a mayores gracias a la intervención del segundo entrenador, Carlos Guerra, y del delegado, Joaquín Jiménez, los dos linenses que se encontraban en la caseta en ese momento, quienes consiguieron reconducir la conducta de los invasores de la caseta.

De acuerdo a la versión ofrecida por testigos presenciales a este medio, la rápida intervención de la Policía Nacional obligó a estos supuestos aficionados- a abandonar el vestuario apenas un par de minutos después de su llegada, sin que se hubiese producido otra cosa que momentos de tensión.

Las fuerzas del orden, para evitar que se reprodujesen los incidentes con los futbolistas, acordonaron la zona anexa al vestidor, lo que permitió a la plantilla alcanzar el autobús sin nuevos problemas. La propia Policía facilitó que el autocar que desplazaba al equipo emprendiese camino de regreso antes que el de los aficionados radicales, al que mantuvo retenido en Estepona durante muchos minutos.

A su llegada al Ciudad de La Línea, la expedición también encontró a un numeroso grupo de efectivos de la comisaría local de la Policía Nacional dispuesto a proteger a los integrantes del plantel en caso de ser necesario, pero futbolistas y técnicos pudieron acceder a sus vehículos sin nuevos contratiempos y abandonar la zona con normalidad.

Como consecuencia de estos hechos, el preparador de la Balona, Javi Moreno, quien había seguido el encuentro desde una cabina al estar sancionado, no compareció en rueda de prensa. El club tampoco facilitó a los medios declaración alguna del preparador para explicar la debacle de su equipo en la Costa del Sol.

Según escribe Francisco Acedo en Al sol de la Costa: "Desde el equipo técnico esteponero se comentó que antes de empezar el partido los ultras de la Balona lanzaron petardos. Uno de ellos entró en una casa y la Policía les dijo que o se identificaban quién había sido o no entraba ninguno de ellos. Por eso los ultras no pudieron entrar y estaban fuera del estadio".

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