5 consejos para que los niños se adapten a un nuevo entorno

Contenido patrocinado

5 consejos para que los niños se adapten a un nuevo entorno
5 consejos para que los niños se adapten a un nuevo entorno

13 de agosto 2024 - 00:00

El cambio de ciudad a ciertas edades puede resultar conflictivo para los niños. Si bien en un futuro lo tomarán como esa experiencia cultural aparte, cuando llega el momento igual no se sienten demasiado cómodos. Sin embargo, cuando a algunos de los padres les han hecho una oferta buena de trabajo, no queda más remedio que el traslado.

Estar en otra casa, otro barrio y otra escuela puede ser duro pero, no por ello nos vamos a quedar estancados en una vida que no queremos, en esa con la que no tenemos suficiente o no estamos especialmente conformes. Hoy, gracias a la cantidad de consejos con los que contamos en las webs, puede que tú también sepas cómo llevarlo.

¿Cómo podemos hacer que nuestros hijos se adapten a un nuevo entorno?

Ya sea porque la idea de ir a un colegio nuevo les abruma o porque cuentan con amigos en un sitio en el que no van a estar, conseguir que los niños pequeños se adapten a un nuevo entorno puede ser difícil. No obstante, después de hablar con algunos expertos en psicología y comportamientos, ciertas situaciones se hacen más llevaderas, mucho más sencillas de lo que pensábamos.

Con esmero, dedicación y sabiendo en todo momento cuáles son nuestras bazas, seguro que conseguimos mucho más de lo que pensamos en un principio, que nos hacemos con la emoción de ese pequeño que busca descubrir algo nuevo, que desea estar con sus padres allí dónde vayan. A continuación, para estar preparado ante la situación, te dejamos con algunos consejos que te ayudarán:

Hablar sobre los cambios

Hablar sobre los cambios con los niños es fundamental para que sepan qué es lo que vendrá, qué tipo de adaptación tendrán que hacer llegado el momento y es que, con la comunicación logramos mucho más desde el principio. De forma pausada y haciéndoles ver que se lo pasarán bien y que pronto harán amigos nuevos, seguro que no tarda en observar la ciudad desde un aspecto positivo.

Hacer pequeños detalles

Una manera de tranquilizar a los niños frente a las mundanzas internacionales Europa, es que tengamos pequeños detalles con ellos, que no nos olvidemos de que son lo más importante para nosotros. Cuando apenas tienes unos años puede que notas de ánimo en la mochila sea algo que les ayude a saber qué es lo que está pasando, a que lleven un poco mejor el cambio que están a punto de vivir. ¿No te parece?

Programar excursiones

Al programar excursiones en el nuevo sitio en que vayamos a estar, estamos dando al pequeño una forma de distracción distinta. Lejos de que se quede todo el día en su habitación con el ordenador y/o teléfono móvil, tenemos que fomentar que conozca el entorno, que se relacione con el nuevo espacio que habitará y, a partir de aquí, seguro que se hace mucho más fácil al cambio.

Mostrar paciencia

Puede que nosotros tengamos que adaptarnos a la nueva situación de forma inmediata pero ellos, que ni siquiera han buscado cambiar, deben tomarse su tiempo. No podemos pedir que los niños vayan a nuestro ritmo, que se hagan al entorno justo cuando han llegado porque, no todos vamos al mismo ritmo ni tampoco se precisan iguales cosas para ser feliz. ¿Lo aplicas?

Solicitar ayuda

Sus amigos o algún familiar con el que se lleven bien pueden ser buenos aliados para esta situación de cambio. Ofreciendo al pequeño una conversación en la que se hable de los beneficios que supone esta nueva situación, seguro que consigue verlo de otra manera, que, aunque le de pena, sepa que siempre podrá contar con esos que están junto a él en todo momento. ¡No pierdas la esperanza!

¿Por qué es importante mantener la calma ante un cambio?

Los padres tenemos que mantener la calma ante cualquier cambio que se produzca. Haciendo ver a nuestros hijos que no todo es tan malo, seguro que conseguimos el propósito que en un principio nos habíamos planteado. En cualquier caso, es importante dar el tiempo que requiera para que en un futuro sirva de aprendizaje, para que exista una posibilidad de ver el lado bueno de las cosas frente a lo que menos nos gusta.

Las mudanzas, que no son sencillas para nadie, sirven para que las familias estén más unidas, para que vean los cambios como algo que hay que hacer y con lo que se puede estar bastante bien. Manteniendo la calma y sabiendo bien cuál es nuestra función, seguro que los niños se hacen mucho más al cambio, que disfrutan de lo que se les ofrece mejor que si no hubiésemos hablado con ellos.

¡No te lo pienses! Si te han ofrecido un nuevo puesto de trabajo que te gusta y/o interesa, con tus hijos sólo tienes que poner las cartas sobre la mesa, decir qué es lo que está pasando y, con el tiempo, seguro que terminan más contentos que tú. ¿Apostamos?

También te puede interesar

stats