Boira supedita la doble plataforma de la Algeciras-Bobadilla a que la línea quede saturada
El comisionado del Corredor Mediterráneo asegura que la ampliación de la capacidad de transporte debe ir precedida de una demanda efectiva del servicio
Destaca los 223 millones presupuestados para la nueva plataforma, la electrificación y el ancho europeo
Los Barrios/El Ministerio de Fomento no tiene entre sus planes afrontar la construcción de una doble plataforma en el tramo ferroviario Algeciras-Bobadilla para permitir el paso simultáneo de trenes en ambos sentidos. Solo lo hará en el momento en que se demuestre que la vía que actualmente está en construcción, cuya puesta en marcha está prevista para 2021, esté “en proceso de saturación”.
Esta fue la conclusión expuesta ayer por el comisionado del Corredor Mediterráneo, Josep Vicent Boira, en una reunión organizada por la Confederación de Empresarios de Cádiz (CEC) en un hotel de Los Barrios con los principales actores del sector portuario y logístico de la Bahía de Algeciras, junto con directivos de asociaciones y de medios de comunicación.
La presencia de Boira sirvió para confirmar las mejores y las no tan buenas noticias sobre el futuro de las infraestructuras ferroviarias de la comarca. Entre las primeras, dos titulares: 1) el tráfico ferroviario se reanudará el próximo mes de abril –una vez listo el viaducto que sustituirá al talud que se llevó por delante la riada del 21 de octubre– y 2) la inversión este año será de 223 millones de euros, primera tacada de un total de 460 millones que se irán ejecutando de aquí a 2021.
Los trenes que vayan entre Algeciras y Bobadilla a partir de esa fecha transitarán sobre una plataforma renovada, electrificada y con ancho europeo. Algo así como jugar “en una liga superior”, en palabras de Boira.
Las malas noticias vinieron a renglón seguido. El Puerto de Algeciras y los operadores consideran que el proyecto que está en construcción nacerá viejo porque lo que realmente necesita el Campo de Gibraltar es una vía con doble sentido, de tal forma que de los 14 trenes semanales de la actualidad se pueda pasar a nada menos que 84.
Boira había dado nones a este respecto en declaraciones previas a los periodistas. “A medida que los tramos se vayan saturando, se irán proponiendo otros nuevos. Es una medida de responsabilidad, sinceramente. En España hemos visto demasiadas infraestructuras desproporcionadas, inversiones de trenes que después no funcionaban y aeropuertos que tienen dificultad para traer aviones. Nuestra obligación es hacer las infraestructuras a medida que la demanda se vaya generando”, dijo.
¿No es evidente ya esa demanda en el Puerto algecireño, que el año pasado movió 600.000 contenedores de importación y exportación? El comisionado se reiteró en lo dicho: “El Puerto de Algeciras necesita una línea mejor que la que tiene actualmente. A partir del momento que se demuestre que la saturación es evidente, se producirán los estudios conducentes a la doble plataforma que se tenga que hacer. Hay que maximizar el uso de las infraestructuras y, en el momento en que se detecte que está en proceso de saturación, proceder a los estudios para hacer una doble plataforma u otras modificaciones sobre la ya existente”.
Boira, ya a puerta cerrada, explicó que el problema añadido es que la construcción de una plataforma de doble sentido tiene como plazo medio de ejecución unos diez años, un periodo demasiado largo para las necesidades de los muelles algecireños. Por eso se optó (con el PP en el Gobierno de la nación) por aprovechar la plataforma existente. Y de paso, rebajar el presupuesto total de 1.200 millones de euros a los 460 millones actuales.
Sobre la mesa queda también la duda sobre la electrificación de la infraestructura, indispensable para poder formar convoyes de trenes más largos –de 750 metros– y competitivos en términos de costes, además de menos contaminantes que los propulsados por gasóleo.
La Algeciras-Bobadilla requiere de la construcción de dos subestaciones eléctricas para suministrar energía a los trenes. Durante un periodo de tiempo y debido al retraso en las obras, ambas llegaron a desaparecer de la planificación ministerial a fin de priorizar otras más perentorias, por lo que su planificación se ha reactivado con retraso. Con todo, Boira se muestra confiado en que estén listas en plazo, es decir, en 2021.
El presidente de la patronal gaditana, Javier Sánchez Rojas, expresó “la puesta a disposición de la CEC al comisionado y su equipo para ver dónde podemos recibir la mejor información y coordinar actuaciones desde nuestra organización para planificar con las empresas sus planes en relación con la conexión de la comarca con los corredores ferroviarios europeos”.
2 Comentarios