La presión de la Guardia Civil y la Policía supera al último de los Castañas
Operación Trapera
Hacía meses que las autoridades habían puesto cerco a Noé D., conocido como 'Mocarra', el último lugarteniente del clan del narcotráfico que quedaba en libertad
Su entrega pone fin a una de las mayores operaciones llevadas a cabo contra las mafias de la droga en el Campo de Gibraltar
Algeciras/La fuerte presión a que le había sometido en el último año la Policía Nacional de La Línea y la Guardia Civil a través de la Operación Trapera ha sido demasiada para Noé D.G., alías Mocarra, un narcotraficante "de toda la vida", según lo describen fuentes policiales. En la mañana de este viernes y tras haber llegado a un acuerdo a través de su abogado, se ha entregado en la Comisaría linense, como hace poco más de un mes lo hizo Wachi, otro histórico del narcotráfico.
Con la detención de ambos se cierra un capítulo importante de la historia de la lucha contra el narcotráfico en el Campo de Gibraltar: el del auge y caída de los Castañas, un clan que las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado dan por desarticulado. Wachi y Mocarra eran los dos lugartenientes de los Castañas, de los hermanos Antonio e Isco Tejón Carrasco. En total y desde el comienzo de la operación, han sido detenidas 103 personas.
Las diligencias, aunque residenciadas inicialmente en el Juzgado nº 5 de Estepona, han sido instruidas por el Juzgado nº 5 de Primera Instancia e Instrucción de La Línea de la Concepción con el apoyo de la Fiscalía Antidroga del Campo de Gibraltar.
Desde que hace poco más de un año la Justicia los pusiera en busca y captura después de que lograran huir durante el inicio de la Operación Trapera de la Guardia Civil, este cuerpo y la Policía Nacional habían estrechado el cerco sobre ambos.
Cercados por los agentes, sin prácticamente libertad de movimientos, el 16 de octubre de 2018 Isco Tejón -en libertad bajo fianza desde finales de octubre pasado- se entregó a la Policía Nacional en La Línea tras pactar su detención. Su hermano mayor, Antonio, había sido arrestado unos meses antes y también está en la calle tras depositar la fianza correspondiente. Hace unos días fue el abogado de Mocarra el que se dirigió al juez.
Despliegue de 600 guardias civiles
Los nombres de ambos, por ese motivo, aparecían en lugar preferente en la lista de objetivos de la Guardia Civil el 12 de febrero de 2019, cuando casi 600 agentes de cuatro comandancias dieron inicio en La Línea y Málaga a una de las mayores redadas que se recuerdan contra el tráfico de drogas, con 36 registros y 29 detenidos solo el primer día. Desde entonces la operación ha sumado 103 detenciones, dos de ellas en Gibraltar.
Las investigaciones comenzaron en abril de 2018 para desarticular a esta importante organización criminal. Se trata de una de las mayores operaciones realizadas hasta el momento contra el tráfico de hachís en Andalucía y la primera de estas características de la Guardia Civil por el número de efectivos, registros y detenidos.
Las entradas en los domicilios se realizaron de forma simultánea para posteriormente proceder a los registros de los mismos, en los que participaron hasta once letrados de la Administración de Justicia. La mayoría de los registros se realizaron en la ciudad de La Línea y el resto en la provincia de Málaga, participando guardias civiles de las comandancias de Algeciras, Cádiz, Sevilla y Málaga, así como el Grupo de Acción Rápida (GAR), el Grupo de Reserva y Seguridad (GRS), Servicio Marítimo y Servicio Aéreo.
Aquel día fueron detenidas 29 personas, entre las que estaban la mujer y un hijo de Antonio Tejón, y ejecutados 29 registros simultáneos. La operación se saldó con la intervención de 600.000 euros en metálico, 7,7 toneladas de hachís, tres narcolanchas y 50 vehículos, muchos de ellos de alta gama y un radar.
Desde entonces han ido cayendo, desde los dos cabecillas de la organización criminal, hasta sus lugartenientes, pero también pilotos de narcolanchas, responsables de la logística y mantenimiento, del entramado financiero, porteadores, jefes de los equipos y un puñado de colaboradores que ayudaban a llevar a cabo el blanqueo de capitales.
De cualquier forma, esa jornada muchos de los jefes de estos clanes del hachís, advertidos de las intenciones de las fuerzas de seguridad, lograron escapar antes de que llegasen los agentes y permanecieron ocultos en la zona durante varias semanas hasta que fueron arrestados uno a uno. Wachi y Noel fueron de los que lograron huir.
Las diligencias, aunque residenciadas inicialmente en el Juzgado nº 5 de Estepona, han sido instruidas por el Juzgado nº 5 de Primera Instancia e Instrucción de La Línea de la Concepción con el apoyo de la Fiscalía Antidroga del Campo de Gibraltar.
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