La arquitectura de La Línea de la Concepción (II)

Observatorio de La Trocha - Nuestras arquitectura comarcal

La restaurada plaza de toros data de 1883 con un estilo barroco popular y la Villa San José es uno de los edificios más elegantes de la ciudad

El desaparecido hotel Príncipe Alfonso tuvo importancia histórica durante la Segunda Guerra Mundial para los espías y la relación con Gibraltar

La arquitectura de La Línea de la Concepción (I)

La plaza de toros de La Línea.
La plaza de toros de La Línea. / Andrés Carrasco
Juan Carlos Martín Matilla - Licenciado en Filología

06 de septiembre 2024 - 02:17

La Línea/Otra de las construcciones destacables de La Línea de la Concepción es la plaza de toros. Fue construida en 1883 y consiste en un edificio de planta poligonal de 49 lados, cuyas aristas están resaltadas por pilastras. En todos sus lados se abren vanos con arcos escarzanos; el edificio original contaba con un ático donde se hallaba el graderío con estructura de madera y en cuyos paramentos se abrían ventanas con el mismo tipo de arcos. Este graderío fue demolido en 1973; también hubo un proyecto de demolición del edificio décadas después, por intereses inmobiliarios. Se salvó y en este año se ha concluido su restauración, reconstruyéndole el citado graderío y abriendo los vanos, que se habían cegado tiempo atrás. Ha quedado magnífica. Los entendidos en arte la han catalogado como de estilo barroco popular.

El caserío linense tradicional estaba formado por sencillas casas de una sola planta, con tejados a dos aguas de tejas árabes, en cuyas fachadas se abrían los vanos de las ventanas y de las puertas, unos adintelados y otros con arcos de tipo escarzano, un tipo de arco muy recurrente en la arquitectura de La Línea. Tras estas casas se extendían amplios patios de vecindad que acogían a numerosos vecinos.

Pero a partir de finales del siglo XIX y principios de XX la burguesía de la ciudad comienza a construir edificios de mayor calidad artística y arquitectónica, cuyos estilos corresponden a los de la arquitectura colonial o modernista. Resulta muy significativo que en La Línea no haya edificios de estilo tardo barroco, con frontispicios y miradores enrejados, al estilo sevillano, o con miradores de madera acristalados, al estilo gaditano o malagueños (en construcciones modernas se han instalado). Solo encontré en una casa un mirador enrejado. La arquitectura burguesa linense refleja la moda de finales del siglo XIX y primer cuarto del siglo XX.

De entre estas edificaciones, cabe señalar a Villa San José, uno de los edificios más bonitos y elegantes de la ciudad. Hasta hace pocos años estuvo ocupado por las dependencias del Ayuntamiento desde 1922 y, ahora museo Cruz Herrera, que se trasladó desde un edifico de estilo funcional sito en la coqueta plaza de Fariñas. Este edificio data de finales del siglo XIX y se podría catalogar dentro de la arquitectura colonial británica, aunque fue modificado en 1968-69.

Villa San José, que fue el Ayuntamiento y hoy Museo Cruz Herrera.
Villa San José, que fue el Ayuntamiento y hoy Museo Cruz Herrera.

Consta de dos plantas y en su fachada principal podemos observar tres cuerpos, dos laterales, en los que destacan sus cornisas, las cantoneras de piedra y los pináculos de los extremos del pretil de su azotea. En sus plantas bajas se abren sendas ventanas con arcos escarzanos, cuyos vanos se orlan con molduras de piedra y sus alféizares descansan sobre modillones del mismo material.

En sus plantas altas se abren sendas ventanas adinteladas, adornadas con cornisas, y cuyos alféizares también descansan sobre modillones. El cuerpo central está formado por un pórtico con tres arcos de medio punto sostenidos por dos columnas y dos semicolumnas adosada a las paredes laterales, de orden toscano. Sobre este pórtico se halla una terraza presidida por una balaustrada que descansa sobre una amplia cornisa. A esta terraza se abren tres puertas con arcos de medio punto, cuyas jambas y arcos se enmarcan con molduras de piedra.

Las claves de los arcos se resaltan con molduritas. Estas puertas están separadas por molduras a modo de pilastras y sobre ellas discurre una gruesa cornisa. La fachada de este cuerpo central posee ciertas semejanzas con las fachadas del palacete de Villa Smith y del hotel Reina Cristina, de Algeciras, contemporáneos. La antigua villa San José se encuentra enclavada dentro de los bellos jardines de la familia Saccone, los cuales cuentan con gran diversidad de plantas y árboles. Un elemento interesante en esos jardines, es un castillo para juegos, de reducido con almenas de tipo italiano, así como algunas esculturas y una espléndida fuente cuya belleza no la libro de ser vandalizada hace unos años.

Un edificio contemporáneo a esta Villa San José era el del desaparecido, por desgracia, hotel Príncipe Alfonso, situado a la entrada de La Línea. Aquel edificio se componía de tres diferentes cuerpos, dos de los cuales contaban con dos plantas; el otro, con una. La parte principal, además, poseía un pequeño ático. En todos sus paramentos se abrían diversos balcones y ventanas, con arcos escarzanos, adornados con baquetillas y molduras lisas.

Hotel Principe Alfonso.
Hotel Principe Alfonso.

Se accedía al edifico por medio de una escalinata que llegaba a una terraza abalaustrada. El pretil de la azotea estaba formado por una balaustrada adornada con florones. Todo el complejo de los edificios estaba rodeado por un muro, con una valla y pilastras con florones. Tuvo mucha importancia histórica durante la Segunda Guerra Mundial, al estar muy relacionado con los ataques a los barcos de Gibraltar realizados por los submarinistas de combate italianos, que tambien tripulaban los minisubmarinos del tipo Maiali. Este histórico edificio, muy importante en las relaciones internacionales y en el espionaje, era, como el hotel Cristina de Algeciras uno de los que tenía más glamour de la comarca.

Cerca de Villa San José se encuentra el edificio conocido como La casa colorada, debido a que su fachada está revestida de ladrillos de este color. Fue la villa de recreo de la familia Saccone y actualmente está ocupado por el colegio del Sagrado Corazón. Es una construcción típicamente británica; una parte consta de dos plantas y otra, de una. En el frente destaca la especie de torreón poliédrico, cubierto por un tejado piramidal, tan característico de la arquitectura colonial inglesa. Las aristas del edificio están resaltadas con molduras a modo de sillares y en sus paramentos se abren vanos adintelados, adornados con unas incipientes marquesinas triangulares de metal.

Colegio del Sagrado Corazón o Casa Colorada.
Colegio del Sagrado Corazón o Casa Colorada.

En cuanto al edifico que fue el Cuartel de Ballesteros, hoy sede de la Escuela Universitaria de Magisterio, hay que mencionar que constituye un armónico edificio, donde destaca el remate de sus fachadas, consistente en un pretil almenado y en cuyo centro se levanta una especie de copete rematado por un frontón triangular y flanqueado por almenas y merlones en línea decreciente y en cuyos extremos se alzan unas torrecillas. Esta zona central sobresale ligeramente con respecto al resto del paramento de la fachada, en la cual se abren numerosas ventanas adinteladas, resaltadas por molduras planas. En su interior se abre un gran patio rodeado de una galería en el piso alto.

Antiguo Cuartel de Ballesteros, hoy Escuela Universitaria de Magisterio.
Antiguo Cuartel de Ballesteros, hoy Escuela Universitaria de Magisterio.

Una de las características de las casas burguesas linenses es el revestimiento de sus fachadas con azulejos vidriados, unas veces solo blancos, y otras, combinando colores; en otras edificaciones se muestran otro tipo de revestimiento cerámico. También existen casas cuyas fachadas carecen de este tipo de revestimiento. Voy a comentar algunos de estos edificios.

En la calle Clavel se levantaba una vivienda cuya fachada mostraba un revestimiento de azulejos vidriados en los que se combinaban los colores blanco y negro. En su piso alto se abrían tres vanos, orlados por molduras lisas, con arcos escarzanos , en el del centro sobresalía un voladizo sostenido por ménsulas de piedra y un antepecho de rejas. Los otros dos vanos carecían de voladizos. La fachada estaba flanqueada por dos miradores de hierro, que lucían una artística crestería en su tejadillo. Sus voladizos eran del mismo estilo que los de su blanco central. Su azotea tenía un pretil, apoyado en una cornisa, formado por pilastras, que debieron de estar coronadas por florones, y barandillas de rejas. Por desgracia fue demolido hace algunos años.

En la calle Duque de Tetuán se encuentra un curioso edificio con su fachada de azulejos vidriados blancos, enmarcada por una cenefa de azulejos vidriados verdes. Lo más curioso son sus vanos; los de la planta salta son muy elevados, llegan hasta la cornisa superior, y están adintelados, y los de la planta baja muestra arcos de medio punto, un tipo de arco inusual en la arquitectura linense. En el centro de la fachada del piso superior luce un balcón cuyo voladizo se apoya en dos ménsulas de piedra, que muestra unas bonitas rejas en su antepecho. Las rejas de los vanos laterales presentan un perfil sinuoso.

Casa en la calle Duque de Tetuán.
Casa en la calle Duque de Tetuán.

En la calle Real se levanta una casa cuya planta alta luce una bonita decoración. Su paramento está revestido de azulejos blancos vidriados y tanto en los extremos como en el friso superior muestra unas cenefas de azulejos vidriados policromados , que enmarcan la fachada. Sobre el friso superior descansa una gruesa cornisa que a su vez sostiene la balaustrada del pretil de la azotea. En la pared se abren dos vanos a cada lado de un mirador central, fabricado en mampostería. Este mirador sobresale de la línea del paramento y posee un antepecho de balaustres, cuyo voladizo se apoya en tres gruesas ménsulas de piedra de perfil sinuoso. Está coronado por una cornisa y una balaustrada. Los dos vanos de cada lado son sendos balcones cuyos voladizos se apoyan en dos ménsulas del mismo tipo, y sendas ventanas. Los antepechos lucen una bonita rejería de perfil alabeado y están orlados por molduras lisas; sus arcos son de tipo escarzano.

En la calle Sol podemos ver otra casa cuya fachada muestra azulejos blancos vidriados, enmarcados entre cenefas de azulejos vidriados policromados. En la planta baja se abren tres vanos con arcos escarzanos, enmarcados con molduras de piedra, las claves de los arcos están resaltadas con relieves. Dos de los vanos son unos balconcillos con antepecho de rejería de perfil sinuoso; el tercero es la puerta de entrada. En la planta alta destaca el mirador central cuyo voladizo se asienta sobre dos ménsulas de piedra, con antepecho de rejería. A cada lado se abren dos ventanas con el mismo tipo de arco, adornado con finas baquetillas.

En la calle San Pablo podemos ver una elegante casa de dos plantas, cuya fachada se cubre con los consabidos azulejos blancos vidriados. En la planta baja se abren cinco vanos con molduras lisas, con el típico arco escarzano; el del centro pertenece a la puerta de entrada, y los otros cuatro, a dos ventanas a cada lado. La parte baja se adorna con un ancho zócalo de piedra.

Casa en la calle San Pablo.
Casa en la calle San Pablo.

En cuanto a la planta alta, hay que comentar que cuenta con el mismo número de vanos, del mismo estilo, el del centro, consiste en un balconcillo con antepecho de rejería, y los otros cuatro se abren, en pareja, dos balcones respectivamente, con antepecho también de rejería, cuyos voladizos se apoyan en gruesas ménsulas de perfil sinuoso, adornadas con molduritas. Por la parte superior de la fachada discurre una cornisa de sección escalonada sobre al cual se encuentra la balaustrada del pretil de la azotea, adornada con florones.

Juan Carlos Martín Matilla

Licenciado en Filología, vocal de Patrimonio de la Asociación Cultural La Trocha y miembro de la Sección 2ª Arqueología, Etnología, Patrimonio y Arquitectura del Instituto de Estudios Campogibraltareños.

stats