La Audiencia condena a 28 años y dos meses de prisión al narco Isaías 'Rayo McQueen' por embestir a dos policías en Algeciras

Algeciras/La sección de Algeciras de la Audiencia Provincial de Cádiz ha condenado al narcotraficante Isaías M. S. a un total de 28 años y dos meses de prisión por el intento de asesinato de dos agentes de la Policía Nacional en Algeciras cuyo coche patrulla fue arrollado violentamente por un todoterreno que conducía, el pasado 5 de septiembre de 2020. Una parte de la condena se vincula, además, con sendos delitos de tráfico de drogas y receptación.

Así consta en la sentencia emitida este miércoles, a la que ha tenido acceso Europa Sur, tras el juicio celebrado a primeros de julio contra Isaías M. S. -apodado como Rayo McQueen en referencia a uno de los coches de carrera que protagoniza la película Cars- y otras cinco personas, tres de las cuales han resultado absueltas.

El tribunal da por probado que aquella jornada Isaías M. S. embistió con intencionalidad un coche patrulla del Cuerpo Nacional de Policía durante un operativo antidroga que se desarrollaba en la zona de la carretera de Los Yankis provocando graves lesiones a los dos agentes. Por estos hechos, la Audiencia le considera como autor penalmente responsable de un delito de atentado con uso de instrumento peligroso en concurso con dos delitos de asesinato en grado de tentativa por los que impone dos penas de doce años de prisión.

A estos 24 años de cárcel se le añaden otros tres años y seis meses por un delito contra la salud pública y otros ocho meses por un delito de receptación; todas suman los ya referidos 28 años y dos meses de cárcel. La Fiscalía solicitaba un total de 36 años de reclusión y la acusación particular, ejercida por el abogado Juan Luis Moreno Retamino, elevaba su petición de pena a más de 46 años de reclusión. La indemnización para los dos agentes deberá fijarse próximamente a través de un auto de aclaración que complementará el fallo de la Audiencia.

La sentencia se ha emitido en un momento crucial del procedimiento, dado que a primeros de agosto Isaías M. S. iba a cumplir con el periodo máximo de estancia en prisión provisional. Ahora, la sentencia ampara que el narcotraficante continúe en el centro penitenciario hasta que el fallo sea firme o por un periodo máximo legal hasta la mitad de la pena impuesta.

Junto a Isaías M. S., también fueron procesados Alexis O. M., Mohamed A. A., Ibrahim B. A, Francisco Javier M. F. e Iván L. A., detenidos en la misma operación antidroga. Las peticiones de condena contra ellos se basaban en supuestos delitos de tráfico de drogas, tenencia ilícita de armas y receptación de vehículo robado.

De estos cinco acusados, la Audiencia ha condenado a Alexis O. M. a tres años y medio de prisión por un delito contra la salud pública (tráfico de drogas) y a Mohamed A. A. a un año de prisión por tenencia ilícita de armas (más la prohibición de tenencia de armas por tres años). El resto de procesados han sido absueltos a criterio del tribunal.

Así fue el juicio

En la primera de las dos sesiones del procedimiento, una decena de testigos corroboró la intencionalidad de Isaías M. S. a la hora de embestir con violencia y a gran velocidad el coche patrulla. Isaías M.S., que al igual que el resto de acusados contestó a las preguntas de las defensas, declaró por el contrario que no fue su intención llevarse por delante el patrullero donde estaban el inspector Francisco Javier y el agente, su compañero Santiago, y que el brutal impacto fue consecuencia de “un accidente”. Según su testimonio, el zeta estaba en mitad de la calzada y, pese a que trató de frenar, no pudo evitar chocar contra él.

Una versión muy diferente de lo ocurrido ofreció una decena de testigos, todos ellos policías que participaban en el operativo antidroga. Uno tras otro coincidieron en que el todoterreno robado y cargado con 17 fardos de hachís, con un peso de 556 kilos, se empotró adrede y a una altísima velocidad contra el vehículo policial pese a que este se había echado a un lado, en la carretera de los Yanquis. Tras el violento choque, Isaías Rayo McQueen presentó fuerte resistencia antes de ser reducido por cuatro policías y nulo arrepentimiento, según los testigos.

El testimonio más impactante y prolongado, más de media hora, corrió a cargo del inspector de Policía. Salvó la vida de puro milagro gracias a la pericia de sus compañeros, que le taparon la hemorragia en uno de sus brazos, con una arteria completamente seccionada, y la también rápida actuación de los sanitarios que se desplazaron hasta el lugar de los hechos, aún de madrugada. Desde ese día marcado en negro, Francisco Javier está apartado del servicio, con una discapacidad del 60% tras pasar en una treintena de ocasiones por el quirófano.

También declararon el otro policía herido y la madre y la pareja del inspector, quienes dejaron constancia del trauma que este último arrastra pasados cuatro años. Como víctima del narco, en acto de servicio.