Fortines del Sur: un nuevo libro desvela las construcciones defensivas desde Algeciras hasta Conil en la Segunda Guerra Mundial
La obra, que detalla las estructuras militares levantadas en la costa para repeler un posible desembarco aliado, será presentada este jueves en la sede de la Mancomunidad
Algeciras/El eco del pasado resuena en las costas del sur de Andalucía, donde las olas acarician los vestigios de una época en la que la incertidumbre y el miedo moldearon el paisaje. Fortines del Sur. Zona Occidental, la nueva obra del Instituto de Estudios Campogibraltareños (IECG) y la Diputación de Cádiz, es mucho más que un catálogo de búnkeres y nidos de ametralladoras; es un relato histórico que entrelaza la geopolítica de entreguerras, la ingeniería militar y la memoria olvidada de una España en tiempos convulsos.
El libro será presentado este jueves, 16 de enero, a las 19:30, en la sede de la Mancomunidad de Municipios del Campo de Gibraltar, ubicada en el parque de las Acacias.
Entre los responsables de este Fortines del sur. Zona Occidental se encuentran miembros de la Sección I del IECG (Geografía e Historia) y otros colaboradores integrados en el grupo de trabajo: José Mª Moreno Ávila, Antonio Muñoz Piñero, Jorge Pérez Fresquet, Juan Antonio Delgado López, David Gaspar Martín Ríos, Óscar Sáez Rodríguez, Pedro Gurriarán Daza, Carlos Gómez de Avellaneda Sabio e Ismael Ruiz Calvante.
La tarea de coordinación de este equipo ha correspondido a Ángel J. Sáez Rodríguez. La obra cuenta, además, con la colaboración de la Asociación Ruta de los Búnkeres, que ha sido clave en la localización y documentación de muchas de estas estructuras.
Una continuación esperada
Tras el éxito de Fortines del Sur. Zona Oriental, que ya va por su segunda edición y abarca el despliegue defensivo en los términos municipales de La Línea de la Concepción, San Roque y Los Barrios, esta nueva entrega completa el estudio del Sistema Fortificado del Estrecho, conocido como la Muralla del Estrecho en recuerdo a otros sistemas defensivos como La Línea Maginot, en Francia o el Muro Atlántico, de los alemanes. Este segundo volumen analiza las defensas levantadas desde Algeciras hasta Conil de la Frontera, con especial atención a los términos municipales de Tarifa, Barbate y Vejer.
Entre sus páginas, destaca un estupendo trabajo sobre los prisioneros republicanos y la represión llevada a cabo durante la posguerra en el Campo de Gibraltar, cuando la comarca se convirtió en un laboratorio de pruebas para los batallones de trabajadores entre los prisioneros más jóvenes.
Sin embargo, el libro no solo enumera las construcciones con precisión cartográfica -apoyadas en un mapa interactivo accesible para el lector-, sino que sitúa cada obra en su contexto histórico y estratégico. "Es un esfuerzo colectivo de veinte años, orientado a la protección y valoración de este patrimonio olvidado", explica Ángel J. Sáez Rodríguez, coordinador del proyecto. Estas edificaciones militares perecen ante la apatía generalizada de las administraciones, el impacto del tiempo y la actividad humana, pues muchas se ubican en parcelas privadas y quedan abandonadas a la suerte de lo que decidan los propietarios del terreno.
Hormigón y miedo
La génesis de las fortificaciones se remonta al periodo de entreguerras, cuando Europa trataba de evitar una repetición de los horrores de la Primera Guerra Mundial. En España, el estallido de la Guerra Civil en 1936 y la amenaza percibida desde Gibraltar llevaron al régimen franquista a erigir estas defensas en tiempo récord. Más de 500 estructuras de hormigón se dispersaron a lo largo de la costa gaditana, con una densidad especialmente alta en el llamado "cerrojo del istmo", alrededor de La Línea y Algeciras.
En la zona occidental, sin embargo, el despliegue fue más escaso. A lo largo de los 11 kilómetros de litoral entre Fuente del Gallo y Cabo Roche, en Conil, se construyeron apenas una docena de fortines. "Este diseño defensivo, obsoleto para 1944, tenía más de operación propagandística que de eficacia militar", añade Sáez Rodríguez, quien destaca las comparaciones con el sistema alemán en Omaha Beach, en Normandía.
A pesar de su importancia histórica, estas estructuras permanecen casi ocultas. La Ley del Patrimonio Histórico de Andalucía de 2007 reconoce su valor, pero las administraciones locales aún no han avanzado en su catalogación ni protección. "Estos búnkeres son testigos silenciosos de un tiempo de incertidumbre, y debemos rescatarlos del deterioro para comprender nuestra historia", enfatizan los autores.
Más que un libro
Uno de los aspectos más innovadores del libro es su enfoque interactivo. A través de un mapa de Google incluido en sus páginas, los lectores pueden explorar la ubicación exacta de cada fortificación. "Es una herramienta para conectar el pasado con el presente, permitiendo que cualquier persona pueda recorrer estos lugares cargados de historia", destaca Sáez Rodríguez.
Fortines del Sur. Zona Occidental no es solo un homenaje a las estructuras de hormigón que salpican el poniente de la costa gaditana, sino un recordatorio del frágil equilibrio entre la memoria histórica y el olvido. Mientras las olas continúan lamiendo los pies de estos testigos de hormigón, la obra del IECG se erige como un faro para quienes buscan comprender las cicatrices de nuestra geografía.
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