Los guardianes del monte

Comienza el calor, las altas temperaturas y la temporada de riesgo máximo de incendios forestales. Un amplio dispositivo humano y técnico adscrito al Plan Infoca -dependiente de la Consejería de Medio Ambiente y formado por casi medio millar de especialistas en la provincia- vela todo el año para mantener uno de los recursos naturales más preciados: los montes.

El Campo de Gibraltar cuenta con una dotación superior al centenar de especialistas siempre alerta ante la posibilidad de que las llamas hagan acto de presencia. Sólo los parques de Los Alcornocales y El Estrecho suman una superficie cercana a las 170.000 hectáreas. 222.000 hectáreas tienen catalogación de superficie protegida en toda la provincia (correspondiente a los seis parques naturales) mientras que el total de áreas forestales y naturales de Cádiz alcanza una superficie de 350.000 hectáreas. Todo el personal puede desplazarse de una a otra en función de las necesidades.

La vigilancia de tan amplia superficie requerirá este año de 18,3 millones de euros para toda la provincia con una amplia repercusión hacia el Campo de Gibraltar. De este monto, 7,4 millones se dedican a las labores de extinción y 10,9 millones (60%) a la prevención.

Los trabajos preventivos son uno de los pilares de la actividad del Infoca durante las temporadas de riesgo medio y bajo (del 16 de octubre al 31 de mayo). Se basan en tareas de desbroce, tratamientos silvícolas y mantenimiento de las pistas y la red de cortafuegos que ocupa una superficie de 1.594 hectáreas en la comarca. Durante este año se han invertido 2,6 millones de euros en trabajos preventivos, otros 529.635 euros para mejorar la red de cortafuegos y medio millón de euros más en el arreglo de caminos rurales del Campo de Gibraltar, según la delegación provincial del ramo.

Pero la prevención, sin la colaboración de otras entidades que implican factores de riesgo para el monte, no sirve de nada. Por ello, la Junta de Andalucía mantiene convenios con Sevillana-Endesa, Adif y Red Eléctrica que se materializan en la limpieza de los tendidos eléctricos así como el corte del suministro de determinadas zonas, algo vital a la hora de afrontar un siniestro.

Cabe recordar que durante la temporada de riesgo alto (1 de junio al 15 de octubre) está totalmente prohibido encender fuego en el monte como una de las principales medidas de cara al ciudadano. Una medida especialmente útil en zonas como la comarca, donde el fuerte régimen de vientos supone un factor negativo que contribuye a una propagación muy rápida de los focos.

Del mismo modo, el departamento que titula Silvia López recalca que provocar un incendio forestal es un delito tipificado en el Código Penal. Acabar con la sensación de impunidad es una de las prioridades, según reconoce la delegada: "Las Brigadas de Investigación de Incendios Forestales (BIIF) formadas por agentes de Medio Ambiente investigan las causas del 100% de los siniestros. Estos equipos llegan al lugar del incendio escasos minutos después de que éste se inicie para intentar esclarecer la autoría de los siniestros así como su causa y motivación, lo que posteriormente nos ayuda a enfocar el trabajo de prevención. Este año esperamos que la investigación de las causas se vea reforzada a partir de la incorporación del Fiscal de Medio Ambiente en el Comité Asesor".

No es la única novedad. Este año, la campaña del Plan Infoca en Andalucía trae consigo la aplicación del nuevo Plan de Emergencias aprobado por la Junta de Andalucía en septiembre de 2010 que persigue mejorar la coordinación de las emergencias, particularmente las que posean posibles implicaciones sobre la población civil, algo en lo que la provincia de Cádiz siempre ha sido pionera.

Este nuevo decreto establece las zonas de peligro respecto a la propagación de incendios, que en la provincia de Cádiz incluyen a 27 municipios, seis de ellos del Campo de Gibraltar: todos menos La Línea. Dichos municipios están obligados a mantener una especial vigilancia en la regulación del uso del fuego y poseer Planes Locales de Emergencia por Incendios Forestales (PLEIF). Las 27 localidades ya poseen este documento en vigor.

VIVIR EN EL MONTE

Igualmente importante es que las urbanizaciones situadas en zonas forestales posean sus propios planes de autoprotección que las doten de elementos como cortafuegos perimetrales o suficientes vías de acceso. Los incendios en zonas urbano-forestal suponen un reto aún mayor contra los elementos ya que además de atajar las llamas es necesario salvaguardar la población que se pueda ver en peligro. La delegación provincial de Medio Ambiente ha celebrado jornadas informativas para difundir pautas de actuación. Entre las urbanizaciones se encuentran El Cuartón (Tarifa), El Faro y las Herrizas en Algeciras. "Como delegada de Medio Ambiente me gustaría subrayar la obligatoriedad de estos asentamientos de tener un plan de autoprotección así como la obligación de los ayuntamientos de exigirlos. Desde Medio Ambiente trabajamos por inculcar el mensaje de que con muy poco esfuerzo se pueden salvar vidas y viviendas en estas urbanizaciones", apostilla López.

Tampoco se descuida la educación en valores. 800 escolares del Campo de Gibraltar han participado este año en campañas consistentes en la visita a Centros de Defensa Forestal (Cedefo) con el fin de que interioricen la importancia de las actitudes responsables en el monte.

Todo ello con el objetivo de lograr una campaña tan eficaz como la de 2010, la mejor de los últimos 30 años en la provincia. En la mano del hombre está, en la mayor parte de los casos, que el monte siga siendo verde.