El nivel de los pantanos del Campo de Gibraltar baja un 20% en solo 70 días
Medio Ambiente
Las reservas de agua pasan de 76,77 hectómetros cúbicos a 61,39 desde el 1 de junio
El mayor consumo por el verano y la evaporación por las altas temperaturas, factores que contribuyen al descenso
La mesa del agua evaluará la situación a finales de septiembre sin que se planteen restricciones a corto plazo
El Campo de Gibraltar ha consumido una quinta parte de sus reservas de agua desde el pasado 1 de junio, cuando comenzó el cuatrimestre de mayor demanda dentro del año hidrológico. Así se desprende de los datos de la Red Hidrosur que monitoriza el estado de los pantanos de toda Andalucía.
La información de la red refleja que las tres presas que abastecen a las ocho poblaciones de la comarca almacenan este miércoles un total de 61,39 hectómetros cúbicos de agua. Esta cantidad supone el 36,54% del aforo máximo conjunto de los tres pantanos (168 hectómetros cúbicos) y abarcan aproximadamente para poco más de un año de demanda en el Campo de Gibraltar.
Así, el nivel de agua ha caído un 20% en 70 días. El pasado 1 de junio, las tres presas atesoraban 76,77 hectómetros cúbicos, el 45,69% del aforo máximo conjunto, por lo que desde entonces se ha reducido el nivel en 22,85 hectómetros cúbicos (equivalentes al ya citado 20% de diferencia a la baja).
El mayor consumo por la temporada estival, la ausencia de precipitaciones y la evaporación son los tres factores sobre los que se asienta esta drástica bajada del nivel, según precisa José Manuel Alcántara, director general de Arcgisa. "Solo la evaporación por las altas temperaturas supone entre un 15 y 20% del consumo durante el verano, cuando se acrecienta el ritmo", detalla.
A lo largo de un año, el Campo de Gibraltar demanda unos 42 hectómetros cúbicos de agua para consumo de la población y usos agrícola e industrial. La cifra crece hasta los 50 hectómetros cúbicos anuales teniendo en cuenta la insolación que reciben las láminas de agua de los embalses durante la temporada estival.
Por el momento, la situación en cuanto restricciones se mantiene. "Estamos dentro de los parámetros del escenario previsto sin lluvias en febrero. La mesa de la sequía se reunirá a finales del próximo septiembre para evaluar nuevamente y trazar los escenarios conforme a las variables técnicas y en función de las posibles lluvias", subraya Alcántara.
Niveles
Por instalaciones, el embalse del Guadarranque, en Castellar de la Frontera, se encuentra al 40,88% de su capacidad máxima, dado que almacena 33,99 hectómetros cúbicos sobre un techo máximo de 83,15. A primeros de junio estaba al 53,3%, con 44,38 hectómetros cúbicos, por lo que su nivel ha descendido en 10,39 hectómetros cúbicos.
La presa de Charco Redondo, en Los Barrios, tiene un nivel de llenado del 30,74%, equivalente a 24,34 hectómetros cúbicos sobre los 79,17 de capacidad máxima. Hace ahora 40 días estaba al 45,3% (35,87 hectómetros cúbicos) y con 11,53 hectómetros cúbicos más de reservas.
En Tarifa, la presa del Almodóvar (adscrita al sistema Atlántico) se encuentra al 53,87%, si bien sus reservas son de 3,06 hectómetros cúbicos (sobre un total de 5,68 hectómetros). En el arranque de junio estaba al 70,2% (3,99 hectómetros cúbicos).
Las precipitaciones acumuladas desde el inicio del año hidrológico (iniciado en octubre de 2022) son sensiblemente inferiores a las del mismo periodo del año precedente. Así, sobre el pantano de Guadarranque se han acumulado lluvias equivalentes a 512,6 litros por metro cuadrado (691,2 en el año anterior); otros 603,2 litros por metro cuadrado en Charco Redondo (911,1 litros en la temporada 2021/2022) y 598,7 litros en la presa del Almodóvar (656,2 el año precedente).
La comarca, bajo situación de sequía
La comarca permanece declarada en situación de "sequía excepcional severa" desde el 15 de octubre de 2021 en virtud de una Orden de la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible.
Desde entonces, rige una prohibición del uso de agua potable para baldeo de calles, llenado de piscinas privadas, riego de jardines, parques públicos y privados, campos de golf, lavado de coches fuera de los establecimientos autorizados, uso de fuentes ornamentales que no dispongan de circuito cerrado de agua, duchas y surtidores públicos.
A efectos prácticos, los ayuntamientos ya han puesto en marcha medidas como la eliminación de las duchas en las playas o la prohibición expresa (ya estaba en vigor) para el llenado de piscinas en El Cuartón y Atlanterra, en Tarifa. No obstante, el llenado de piscinas privadas es uno de los aspectos más complicados de controlar por parte de las autoridades.
Estas medidas se mantendrán en vigor hasta que no se registre al menos durante dos meses consecutivos un nivel de reservas de agua superior a los 77,6 hectómetros cúbicos de agua entre los embalses de Guadarranque y Charco Redondo.
La Comisión de la Gestión de la Sequía de la Demarcación Hidrográfica de las Cuencas Mediterráneas Andaluzas fijó hace ahora justo un año una batería de medidas específicas para cada sistema de explotación. En el caso del Campo de Gibraltar se acordó ampliar la reducción adicional en el abastecimiento urbano y uso industrial del 10% al 20%. Asimismo, ya se aprobó en noviembre de 2021 una reducción de la dotación para riego a 2.000 metros cúbicos por hectárea y año, de acuerdo con lo recogido en el Plan Especial de Sequía.
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