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Tren Ronda-Bobadilla: menor impacto ambiental y reducción tanto de costes como de plazos de obra

El estudio presentado por la ingeniería Ayesa en 2023 para resolver la Declaración de Impacto Ambiental apostaba porque la electrificación de las vías se haga sobre el actual trazado ferroviario en lugar de las dos rutas alternativas

Mapa del tramo entre Ronda y Bobadilla, con el trazado actual y los dos alternativos analizados. / Ayesa

Algeciras/Mantener el actual trazado es la mejor de las tres alternativas existentes para llevar a cabo la electrificación y reforma del estratégico tramo de 73,6 kilómetros de la línea ferroviaria que une las estaciones de Ronda y Bobadilla, en la provincia de Málaga. Esta es la conclusión del estudio informativo elaborado y presentado en marzo de 2023 por la empresa Ayesa y que debe servir de base para la resolución de la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) del proyecto por parte del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miterd).

El informe de Ayesa, elaborado a instancias del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, subraya tres factores clave para desarrollar la electrificación de las vías sin desviarse del trazado existente desde el S.XIX: su menor impacto ambiental, la reducción de costes y los menores plazos de ejecución de las obras respecto a las otras dos rutas analizadas. La compañía de ingeniería sevillana analizó la posibilidad de construir desde cero esos dos nuevos tramos como alternativas, pero les otorgó menos puntuación en el balance final pese a subrayar que conllevarían también una reducción del tiempo de viaje y la supresión de varios pasos a nivel.

Cuatro criterios fueron tenidos en cuenta a la hora de hacer la evaluación de los tres trazados: medioambientales, funcionales, de integración territorial y económicos, en los que se incluyen los costes de la inversión y los plazos de ejecución.

“En concordancia con el análisis multicriterio realizado, teniendo en cuenta los criterios funcionales, ambientales, territoriales y económicos, se considera que, si bien las tres alternativas estudiadas resultan viables, la Alternativa 1 (la ya existente) es la que cumple de forma más idónea con los objetivos perseguidos y, en consecuencia, esa es la alternativa que se propone en el presente Estudio Informativo”, sentenciaba el informe.

Puntuaciones otorgadas a las tres alternativas propuestas en cada apartado y las sumas totales. / Ayesa

Como se aprecia en el cuadro superior, la Alternativa 1 logra más puntuación en función de los criterios ambientales y de inversión (subdivididos en costes y plazos de la obra), logrando una puntuación final de 7,67 puntos sobre los 6,68 y 5,62 de las Alternativas 3 y 2, respectivamente. Estas últimas, por el contrario, logran mejor nota en cuanto a trazado (al contar con menos curvas) y estaciones (se entiende que por ser de nueva ejecución).

La electrificación de la Ronda-Bobadilla es clave para agilizar el transporte de viajeros y mercancías desde y hacia el Campo de Gibraltar, pero muy especialmente para dotar al Puerto de Algeciras de una conexión ferroviaria con el conjunto de España y de Europa, mucho más competitiva que la actual a través de los corredores ferroviarios Mediterráneo y Atlántico de la UE. Uno y otro tienen origen y final en la primera dársena española por movimiento de personas y mercancías, si bien las inversiones en este nodo de transporte estratégico han llegado a cuentagotas en las últimas décadas.

Uno de los grandes mazazos recibidos por la electrificación de la vía tuvo lugar en abril de 2020, cuando el hoy Miterd advertía que dicha actuación podría tener "efectos adversos significativos" sobre el medio ambiente al afectar a espacios protegidos de la Red Natura 2000. Según el ministerio, el proyecto de electrificación sobre el trazado actual afecta directamente (en 2.570 metros de longitud de la línea férrea) al espacio de Red Natura 2000 Lagunas de Campillos y en las cercanías se encuentran otros espacios de la red cuyos objetivos de conservación pueden verse potencialmente afectados: las zonas de especial conservación Río Guadalevín y Corbones, que actúan como corredores ecológicos, y la ZEC (Zona de Especial Conservación ) y ZEPA (Zona de especial protección para las aves) Sierra de Grazalema y Sierra de las Nieves que, además de su valor florístico, albergan importantes áreas para rapaces.

Los dos recorridos alternativos acortarían el tiempo de viaje y tendrían menos impacto en el entorno, pero cuestan más y llevaría más tiempo hacerlos

En el mismo sentido, la Delegación Territorial de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía en Málaga advirtió que la afección sería especialmente significativa sobre las Lagunas de Campillos. La actual línea ferroviaria atraviesa esta reserva natural y sitio Ramsar de importancia internacional, integrado por un conjunto de 6 lagunas: Dulce, Salada, Camuñas, Capacete, Cerero y Redonda, con hasta 89 especies de aves distintas. La única forma de evitar el impacto sería ejecutando una variante que discurra fuera de la ZEC/ZEPA.

La conclusión del estudio informativo redactado por Ayesa, en el que se opta por mantener el trazado existente como mejor opción, contrasta con las cautelas de carácter medioambiental planteadas por el Miterd y la Junta de Andalucía. De hecho, la electrificación de las vías actuales conllevaría la descarbonización del tren (las locomotoras se mueven ahora en ese tramo con motores diésel) y evitaría el movimiento de terrenos implícito en la construcción de cualquiera de las otras dos alternativas.

Pequeñas modificaciones

“El componente ambiental juega un papel importante a la hora de valorar las alternativas planteadas”, destaca el informe, que asigna un valor a los impactos producidos en los siguientes aspectos: vegetación y hábitats, fauna, paisaje, vías pecuarias y montes públicos y, finalmente, la orografía.

Sobre la electrificación y mejora del trazado actual, el estudio informativo señala que el proyecto “consiste en el aprovechamiento de la plataforma existente en todo el ámbito” analizado y que tan solo habría que hacer “rectificaciones de alineaciones y de rasante en puntos específicos para permitir la implantación de los elementos de electrificación previstos […] o con motivo de las necesarias adaptaciones de las obras de drenaje”.

Los trazados alternativos 2 y 3 se presentan, añade, “con el objeto de evitar su paso por áreas sensibles de protección ambiental presentes en la zona”, de acuerdo a la resolución del Miterd de 2020, aunque, de acuerdo a la baremación final resultan ser más negativos para su entorno.

Un trazado inaugurado en 1892

El informe constata que la línea férrea Bobadilla-Algeciras de 176,2 kilómetros -en la que se incluye el enlace entre Ronda y Bobadilla- se mantiene con una “vía única y sin electrificar” desde que fue inaugurada en 1892.

“Dada la importancia estratégica para la economía nacional” de Algeciras, su puerto y del conjunto de la comarca, “se están llevando a cabo un conjunto de actuaciones para conseguir un aumento de la capacidad, de la seguridad y de la regularidad de las circulaciones en la línea, así como para su futura integración en el Corredor Mediterráneo y Atlántico. Entre estas actuaciones se encuentra la electrificación de la línea”, subraya Ayesa.

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