La foca gris Carmela deja Gibraltar y sigue su viaje por el Mediterráneo hasta Marbella

Gibraltar/La inusual travesía de Carmela, la foca gris que ha cautivado a la comunidad científica y a los amantes de la naturaleza, ha sumado un nuevo capítulo. Tras su paso por Gibraltar, el animal ha sido avistado esta semana en aguas de Marbella, donde protagonizó un curioso encuentro con un pescador.

Según ha informado la organización Ecolocaliza, la foca fue vista en alta mar por Juan, un aficionado a la pesca de calamares. "Mientras intentaba subir uno al barco, Carmela le robó la captura directamente del anzuelo", relatan. Lejos de molestarse, el pescador decidió recoger sus aparejos para evitar cualquier accidente y permaneció en la zona hasta asegurarse de que el animal se había alejado con seguridad.

La llegada de Carmela a Marbella confirma su permanencia en el Mediterráneo, un entorno ajeno a su especie. En las redes sociales, Ecolocaliza ha solicitado la colaboración de las autoridades locales para balizar cualquier zona donde la foca decida descansar. "El reposo en tierra es vital para que pueda continuar su viaje", han subrayado.

Mientras tanto, los Agentes de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía han desplegado la Unidad de Drones para monitorizar su estado y documentar su presencia en el litoral malagueño. En un vídeo publicado en redes, se observa a la foca en una playa, tranquila, desafiando los pronósticos sobre su adaptación a estas aguas.

Desde diciembre de 2024, Carmela ha recorrido cientos de kilómetros, desde las frías aguas atlánticas hasta el Estrecho de Gibraltar. Su periplo la ha llevado por localidades como Conil y otros puntos de la costa gaditana, generando un enorme interés tanto en redes sociales como entre expertos. Su llegada a Gibraltar el pasado 7 de marzo despertó un gran revuelo, con instituciones como Ecolocaliza pidiendo prudencia para no perturbar su descanso.

El caso de Carmela es excepcional. Las focas grises habitan principalmente el Atlántico Norte y su presencia en el Mediterráneo es extremadamente rara. Su futuro es incierto, pero la atención que ha despertado podría jugar a su favor. "Ojalá entre todos podamos ayudar a su supervivencia", desean desde Ecolocaliza. Mientras tanto, la foca gris sigue su camino.