La Balona pilla cacho (3-1)
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Canario, espectacular, y Stoichkov, que firma un 'hat-trick', conducen a los albinegros a un triunfo más que merecido que supone un punto de inflexión en la lucha por la salvación.
La línea/Canario y Stoichkov. Stoichkov y Canario. Dos que, paradojas de este bendito deporte, aparecieron en infinidad de quinielas como descartes de la Balompédica durante el mercado de invierno fueron los que se asociaron ayer -con la inestimable colaboración de Gato- para llevar a los albinegros hasta una victoria valiosísima. No tanto porque suponga un pasaporte hacia la permanencia, que no lo es, sino por las consecuencias que podría haber tenido para la escuadra albinegra, tanto en el apartado anímico como en el clasificatorio, un resultado adverso. Los de La Línea cuajaron un excelente primer tiempo, se relajaron tras el tres-cero y cuando el cansancio les pudo -especialmente cuando le llegó a Canario- emborronaron en los minutos finales un resultado más que merecido.
Después de una semana complicada, Julio Cobos tomó ayer decisiones relevantes. Puede parecer que la que más sea ubicar a Stoichkov de centrodelantero, por cuanto el sanroqueño anotó el segundo hat-trick de su paso por la Balona y los goles, en el fútbol, son lo que marcan la cotización. Pero seguramente su determinación más trascendente fue dar mando en plaza a Canario, que leyó el juego, acertó en todas sus decisiones y galvanizó el fútbol de los de casa, poniendo de manifiesto lo que es de sobras conocido: que está capacitado para jugar en una categoría superior, pero que le falta la constancia que esta campaña le ha impedido, incluso, ser titular con los albinegros. El público, que le sigue queriendo y mucho, le tributó una cariñosa ovación cuando era sustituido.
Salvando un lanzamiento raso del pichichi Airam en el minuto dos, el Mancha Real no existió en ataque. La Balompédica se apoderó del balón y fue atrincherando a un rival que, visto lo que enseñó en el Municipal, cuesta creer que esté peleando de tú a tú con los locales por evitar el descenso. Es más, cuesta creer que esté aún peleando por evitar caer al pozo de la Tercera.
A los 12' Canario se asoció con Gato, éste -que no encontró rival en Manolo León durante toda la mañana- afinó para ponérsela a Stoichkov en el segundo palo y el nueve -que jugó de lo que, dicen, no le gusta jugar- acertó con la portería. Los visitantes reclamaron con insistencia fuera de juego de Gato en el arranque de la jugada. Desde la grada es casi imposible de determinar si esas quejas estaban justificadas.
Todavía estaba el Mancha Real a vueltas con lo que consideraba una injusticia (16') cuando otra vez Canario colocó en ventaja a Rafa Navarro, que le pegó tan mal que consiguió que el balón llegase a Stoichkov para que éste firmase el dos-cero.
Lo que restaba de primera parte fue casi un calco de lo que se vio una semana antes en el Nuevo Arcángel. Una Balona alegre, desenfadada, con entradas por banda, disfrutó de otras tres claras oportuniadades, pero claras, para haber redondeado el marcador.
Sin embargo Jesús acertó a evitar que Canario encumbrase aún más su actuación (26') en un mano a mano, Zamorano primero estrelló el esférico en el larguero (28') y más tarde (37') se empeñó en no mandar atrás e intentó sorprender desde la línea de fondo, pero la parte exterior del palo evitó el tercero.
El marcador del primer tiempo se antojaba corto y para colmo Olmo cayó lesionado y los de casa tuvieron que reconstruir su zaga, retrasando a Alfonso y ubicando a Carlos Selfa en la medular.
Nada más empezar el segundo tiempo Stoichkov dictó sentencia y completó su triplete. Esta vez fue el capitán Ismael Chico el que le situó con un pase perfecto delante del portero y detrás de la defensa y el sanroqueño acertó otra vez en la definición.
Con el partido resuelto, el césped seco y la temperatura, el fútbol fue decayendo, lo que por otro lado era lógico. Canario fue pagando su elogiosa sobreexposición al juego y ya no intervenía tanto y la Balona fue menguando.
El Mancha Real, que había realizado un doble cambio en el intermedio, no mejoró apenas. Con todo, a diez del final y en su primera incursión en el área de la segunda parte, una falta de entendimiento entre Óscar Santiago y Mario Gómez en un balón largo propició que Álvaro hiciesde el 3-1.
Lo suficiente para meter el miedo en el cuerpo más que al equipo, a la grada. Pero el Mancha Real no tenía para más y la Balompédica no se iba a permitir menos. Queda una final menos.
Óscar Santiago l
Rafa Navarro H
Luis Madrigal H
Olmo H
(Carlos Selfa, 40') l
Mario Gómez l
Ismael Chico H
Zamorano HH
Alfonso H
(Bauti, 70') s.c.
Stoichkov HHH
Canario HHH
(F. Ferrón, 74') s.c.
Gato HHH
Jesús l
Ramón l
(Gassamma, 46') H
Cifu l
Fatah l
Josema l
Manolo León l
Manolillo H
(Israel Jerez, 72') s.c.
Cervera H
Ángel l
(Álvaro, 46') H
Pedro Corral l
Airam H
La falta de fluido eléctrico impide que se riegue el terreno de juego
El césped del estadio Municipal de La Línea presentaba ayer un aspecto seco (lo que se traduce en una enorme dificultad para realizar un fútbol rápido) y el marcador electrónico no funcionó como consecuencia de una avería en el servicio eléctrico de la instalación. Las deficiencias comenzaron a dejarse sentir durante la jornada del sábado. El Ayuntamiento no tenía personal especializado de guardia, por lo que contrató los servicios de una empresa ajena al municipio, que en principio solventó la situación. Sin embargo, el problema reapareció a primera hora de la mañana de ayer. Una 'fase' del servicio tuvo que ser desconectada para que el choque entre los albinegros y el Mancha Real pudiese disputarse. La Balompédica siente una especial preocupación porque en caso de no solucionarse la avería en las próximas horas y después de una jornada de intenso calor para estas fechas, el césped podría resentirse.