(21-24) Dolorosa derrota del Ciudad de Algeciras

El Ciudad de Algecirasse complica su existencia. El equipo de David González enlazó este sábado, ante un rival directo en la lucha por la permanencia como Montequinto Dos Hermanas, su cuarta derrota consecutiva lo que le sitúa con solo tres puntos de renta sobre la zona de máximo riesgo. Los algecireños echaron por tierra todo el trabajo del partido en los diez últimos minutos de la primera mitad y el partido volvió a poner de manifiesto hasta qué punto echan de menos al incombustible Juan Bermejo, de baja por lesión.

El Ciudad de Algeciras-Montequinto no pudo tener un comienzo más emotivo. El conjunto de casa rindió homenaje en los prolegómenos del choque a su exdirectivo Miguel Fernández Picazo Miguel Fernández Picazo, fallecido el pasado mes de junio. La directiva que encabeza Pedro Soria entregó recuerdos a su viuda y a su hijo Miguel Fernández, forjado en la cantera local y que ahora juega precisamente en el conjunto nazareno.

Durante los primeros veinte minutos el choque estuvo presidido por el máximo equilibrio. Con precipitación y errores por ambos bandos, pero con el resultado siempre en márgenes muy pequeños. Fue en los diez últimos minutos de la primera manga cuando se rompió el partido. Los locales, que se vieron obligados a reubicar a algunos de sus jugadores para tratar de paliar la falta de Juan Bermejo, no terminaban con acierto un ataque. Y lo que es peor, concedían contras que los sevillanos fueron rentabilizando. El parcial de 1-8 habla por sí solo. El marcador al intermedio era de 8-15.

En la segunda parte y más con el corazón que con argumentos el Ciudad de Algeciras consiguió ir recortando las diferencias y en algún momento los aficionados llegaron a pensar que podía producirse la remontada.

Pero literalmente a los de casa le faltaron argumentos en ataque y tiempo para la proeza y la victoria se fue para Sevilla.

El Ciudad de Algeciras despide 2019 el próximo sábado. Repite en casa, esta vez ante el Iplacea de Alcalá de Henares. Un duelo que se torna importantísimo porque todo lo que no sea un triunfo coloca a los algecireños demasiado cerca de los puestos de descenso.