Estrada, ilusiones renovadas

La línea/La Real Balompédica comenzará el próximo nueve de julio una pretemporada muy especial para Jesús Estrada. El joven preparador físico asidonense se estrena en Segunda división B. La mañana de ese segundo lunes de julio el míster ha citado a todos sus hombres en el Municipal para llevar a cabo los protocolos: presentación, pesaje... Ya por la tarde, el preparador catalán dirigirá su primer entrenamiento. Desde ese día y durante siete semanas entre ambos pondrán los pilares de lo que se pretende que sea una ilusionante campaña.

Jesús Estrada llega procedente de la Unión Deportiva Los Barrios, en la que la pasada campaña llegó a ejercer accidentalmente de entrenador en uno de los innumerables relevos que se produjeron en el banquillo gualdiverde. Rafa Escobar y Carlos Ríos, que lo han tenido en su equipo de trabajo en el San Rafael, avalan con muchos elogios su desembarco en el Municipal.

Antes de eso el nuevo preparador físico de la Balona, natural de Medina Sidonia, había desarrollado sus funciones en la cantera del Xerez Club Deportivo y llegó a estar en el cuerpo técnico del primer equipo azulino cuando éste se despeñó a Tercera. Después, durante tres temporadas trabajó en el Antoniano de Lebrija, en cuyo ascenso a Tercera participó.

Estrada es consciente de que desde dentro de diez días le espera "un reto diferente, muy complicado" al que llega "con toda la ilusión del mundo" porque supone "un ascenso personal a Segunda división B".

"Lo que tengo claro es que por trabajo no va a quedar, así que solo queda intentar ponerlo todo y que todo salga bien", señala el preparador físico, que tuvo su primer contacto personal con el técnico, Jordi Roger, el mismo día en que el entrenador catalán era presentado como como nuevo responsable técnico del centenario conjunto de La Línea. "La verdad es que todo el mundo habla bien de él", puntualiza.

"Cuando nos vengamos a dar cuenta, ya estamos dando vuelta por los terrenos de juego", comenta Estrada, que no le presta especial importancia al hecho de que los albinegros se vean obligados a entrenarse a veces fuera del Municipal.

"Carlos Ríos me ha enseñado muchas cosas, pero quizás la más importante, en la que hacía más hincapié, es en la necesidad de adaptarse a todo y afrontarlo de la mejor manera y siempre con una sonrisa", finaliza.