Juan Mari releva a Manolo Ruiz
real balompédica linense
La Balompédica sostiene que la salida del técnico jerezano se produce "de mutuo acuerdo" y por discrepancias "no deportivas"
El entrenador linense dirigirá al equipo en Lorca y el club no le cuelga el cartel de interino
El entrenador linense Juan Mari Sánchez toma hoy el mando de la primera plantilla de la Real Balompédica Linense, después de que a primera hora de ayer la directiva anunciase, vía Twitter, la destitución del jerezano Manolo Ruiz. El preparador físico, Raúl López, y el de porteros, José Mari Moreno, siguen en la entidad pero no así José Luis Moncayo, que había desempeñado las funciones de segundo entrenador, lo que podría implicar la incorporación, siquiera momentánea, de algún técnico de la casa al cuerpo técnico e incluso que ese puesto lo acabase ocupando el propio Juan Mari si es despojado de la condición de primer entrenador, después de su debut el próximo domingo (17:00) en la visita a Lorca.
Una cosa es cierta, el presidente, Alfredo Gallardo, garantiza que Juan Mari Sánchez no llega al cargo necesariamente como interino sino como una apuesta personal y explica que ayer le dio la alternativa con una frase muy rotunda: "Ahí tienes tu gran oportunidad".
Manolo Ruiz abandona el banquillo de la Real Balompédica después de haber desembarcado en la centenaria escuadra linense en los últimos días del mes de diciembre del pasado año como relevo del cordobés Rafa Escobar, que a su vez había estado cinco años en el cargo. Desde entonces el jerezano había dirigido al conjunto albinegro en 33 partidos de Liga, con un balance de doce victorias, diez empates y once derrotas. Durante ese periodo, comprendido entre dos temporadas, la Balompédica anotó 42 goles y recibió 45. Cuando el ahora destituido firmó su contrato hace ahora poco menos de un año la Balompédica ocupaba la decimocuarta plaza de la clasificación del grupo IV de la Segunda división B. Tras la derrota de la pasada jornada, la duodécima.
La salida del preparador de Jerez de la entidad se produce justo después de que la Balona cosechase el domingo su primera derrota en nueve jornadas, al caer 2-5 en el estadio Municipal de La Línea a manos del Mérida AD.
Punto final al paso de Manolo Ruiz por la Real Balompédica. El entrenador, en espera de aclarar las condiciones de su finiquito, declinó ayer amablemente la oferta de este periódico para que expresase su opinión sobre lo sucedido. Hoy tiene previsto desplazarse a La Línea para entrevistarse con los dirigentes.
La Balompédica, que hizo pública su decisión ayer a través de Twitter a las 13:07, agregó pasadas las 21:30 una nota en la que se leía: "La junta directiva de la Real Balompédica Linense y el técnico, Manuel Ruiz Pérez, han acordado, de mutuo acuerdo, la rescisión del contrato que le vinculaba hasta el 30 de junio de 2017 por discrepancia de índole no deportiva entre ambas partes. Desde la Real Balompédica Linense se le quiere agradecer a Manuel Ruiz Pérez la dedicación y trabajo durante este tiempo al frente de la dirección técnica del equipo y se le desea la mejor de las suertes en el futuro".
Con independencia de las versiones oficiales, que en el caso del club ya deja entrever parte de la realidad, lo cierto es que el presidente, Alfredo Gallardo, y Manolo Ruiz no están en sintonía desde hace meses y que ese divorcio es el que llevó ayer a la Balompédica a destituir a un entrenador que había perdido un solo partido en nueve compromisos ligueros.
Después de que a finales del pasado curso existiese una comunión total y que la renovación del preparador se llevase a cabo casi con un apretón de manos sobre el terreno de juego, las diferencias empezaron a ensancharse en los primeros meses del verano con la formación del plantel, porque la directiva entendía que el míster exigía por encima de las posibilidades económicas de la entidad y el entrenador, que algunos de los futbolistas contratados estaban demasiado lejos de ser las primeras opciones manejadas y que a veces las diferencias económicas por las que se renunciaba a determinados fichajes eran mínimas. Eso sí, los sentimientos de ambos no trascendían a la opinión pública.
En pleno verano saltó la chispa, con motivo de la final del Trofeo Mancomunidad. La decisión de Manolo Ruiz de no retirar el equipo de la final disputada en el Mirador a pesar de que el delegado, en representación del club, así lo pretendía creó un cisma que ya no volvería a cerrarse.
Alfredo Gallardo, quien no descarta que Juan Mari Sánchez pueda seguir al frente del plantel después del encuentro del próximo domingo ("es un revulsivo que no tiene presión y nunca se sabe lo que puede pasar"), sostiene que a pesar de la racha de resultados "el equipo no estaba bien" y agrega: "La directiva entiende que Manolo se tenía que marchar, que era el momento y él lo entiende".
"La única realidad es que nos hemos equivocado todos, el presidente, los directivos, los jugadores... y el presidente a la cabeza, pero hay que darle una solución a algo que no está funcionando", insistió.
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