Liam Walker, un niño bueno

El gibraltareño Liam Walker volvió el martes a formar parte de la Real Balompédica decidido a acabar para siempre con la imagen de jugador tan brillante como indisciplinado, condición esta última que le ha impedido alcanzar mayores objetivos. "Yo siempre he sido bueno", contesta con vehemencia cuando se le pregunta por las dudas que su conducta levantó en el pasado, aquellas que le llevaron a salir en diciembre del pasado año del vestuario albinegro y a ser acusado de "fiestero" por el presidente, Alfredo Gallardo, decepcionado después de las muchas expectativas que el atacante levantó en su llegada al primer equipo.

"No creo que tenga que someterme a ningún examen ni que tenga que demostrar nada a nadie", dice Liam, que regresa a La Línea después de haberse reivindicado a las órdenes de Rafa Escobar en la Unión Deportiva Los Barrios. "Yo siempre me he dedicado al fútbol y llego para ser lo más rentable posible a la Balona".

Liam Walker asegura que su asignatura pendiente es conseguir regularidad en la Real Balompédica. "No logré convencer a Eduardo Vílchez, así que ésa es mi meta, hacerlo ahora con Rafael Escobar, aunque reconozco que en la Unión me ha dado mucha confianza y que esa parte del camino ya la tengo andada".

"Tengo mucho que agradecerle, primero porque fue el que contó conmigo para que fuese a Los Barrios cuando yo estaba jugando en Primera Andaluza y porque una vez allí me dio los minutos que necesitaba", agrega en referencia al preparador cordobés, ahora al frente de la Balona. "A mí me ha dado hasta pena de que acabase la Liga, porque cada día me sentía más a gusto".

El futbolista admite que en su paso por el conjunto de la Villa ha podido actuar "con mucha comodidad" en el aspecto deportivo "aunque en el aspecto económico ha sido todo un caos, no se cumplieron los compromisos y todo el mundo sabe lo que ha pasado".

En La Línea "sé que la afición es más exigente, pero a mí no me preocupa que me vayan a mirar con lupa, si es que lo van a hacer, porque confío en mí. En lo que se refiere al equipo, es pronto para hablar de eso, pero a mí me gustaría que nos metiésemos en liguilla. Ésta temporada se han quedado a las puertas, a ver si podemos lograrlo nosotros".

El delantero gibraltareño forma pareja, a la espera de la tercera contratación, con el algecireño Issac Luis Chico Copi, con el que ya coincidió en 2006 en Algeciras y los primeros meses de la temporada pasada en la propia Balona. "Mi relación con él es extraordinaria y en el campo creo que podemos jugar juntos. Esperemos que entre los dos le demos muchos goles al equipo".