El Tesorillo confía en la ayuda albirroja

Igual que el Tesorillo le echó un cable al Algeciras hace un mes sacándole un empate al Arcos, ahora es el equipo algecirista el que puede colaborar en la permanencia del tesorillero. Y es que de los ocho partidos que le quedan al conjunto algecireño, el calendario le depara cuatro contra equipos de la parte baja de la tabla clasificatoria, adversarios por tanto del Tesorillo en la lucha por la salvación. "Eso sí, por mucho que nos ayude el Algeciras, luego nosotros tenemos que cumplir ganando", afirma el entrenador de los amarillos, Manolín Sánchez, que no obstante admite que está muy pendiente de los resultados de los algeciristas "primero porque me alegría mucho que subiera y segundo, porque nos puede ayudar bastante".

Para empezar, el próximo domingo el Algeciras se mide al Tharsis (14º), que es precisamente el último equipo que se salvaría si la Liga acabara tal cual está ahora. Si el Comité de Competición concede al Tesorillo los puntos del partido ante el Punta Umbría, la próxima jornada la puede acabar a sólo seis del bloque minero, con ayuda algecirista.

Después tiene que jugar el Algeciras contra el Unión Sporting (17º) en el Nuevo Mirador, visita al Chiclana Industrial (16º) y por medio juega el aplazado en Bornos ante el Bornense (15º). Además, excepto este último, todos los equipos antes nombrados se habran enfrentado antes al Arcos, que pugna con los algeciristas por el ascenso directo.

"Está claro como el agua que no podemos tirar la toalla", afirma Manolín. "Yo creo que con nueve o diez puntos podemos conseguirlo, sobre todo porque nosotros ya nos hemos quitado ese bache del calendario que ahora tienen que jugar todos nuestros rivales directos", apostilla.

"El ambiente en el vestuario es el de un grupo de hombres que tienen ganas de salir donde están. Yo no creía en esas cosas, pero ahora me parece que lo que nos está pasando es cosa de brujería", continúa el entrenador.

Hoy está previsto que el presidente, José Antonio González, mantenga una reunión con la plantilla. Se prevé que el encuentro sea mitad tirón de orejas, mitad palmadita de ánimo.

"Hay que pelear hasta el último momento porque tenemos detrás un pueblo al que representamos y que se merece lo mejor", finaliza Manolín.