Cuando no se puede ganar... (0-0)

Algeciras/El Algeciras no pudo con el Linares ni el Linares pudo con el Algeciras. El equipo de Iván Ania firmó una igualada sin goles ante un rival que fue capaz de neutralizar el tirón de los albirrojos en el Nuevo Mirador. Que no es nada fácil. Con escasez de ocasiones -una de Romero, la más clara para los locales-, el partido se libró con un derroche físico que desembocó en una batalla táctica sin ganadores ni vencidos, aunque seguramente el punto le sabe un poquito mejor a los de Linarejos. El Algeciras de Ania estuvo lejos en cuanto a claridad de ideas a ese Algeciras alegre y con picante. No fue un buen día para los de rojo y blanco y quizás lo más sensato sea aplicar ese dicho de que "cuando no se puede ganar, lo mejor es no perder".

Segundo empate consecutivo del Algeciras en el Nuevo Mirador y quinta jornada seguida sin perder para los de Ania. Los algeciristas se ponen con 44 puntos y siguen en toda la pomada del playoff del ascenso, a la espera de que acabe la jornada, enganchado a esa pelea por la cuarta y la quinta posición del grupo II de la Primera RFEF. La derrota del Castellón y el empate del Nàstic permitieron a los albirrojos dormir en puesto de playoff como quinto.

El Algeciras sumó y volvió a dejar la portería a cero, pero dejó cierta sensación de incapacidad, de no saber romper los esquemas de un Linares fiel a lo que se esperaba del conjunto de Alberto González, un equipo sin estrellas pero repleto de gladiadores. Al contrario que en las tablas con el líder Albacete, en esta ocasión el Algeciras estuvo mucho más lejos de la victoria de lo que acostumbra cuando juega ante su parroquia. Los albirrojos echaron mucho de menos a su '9' y también todo lo que genera Tomás desde su banda. A los de Ania les faltó pausa, fútbol y llegada, aunque, también hay que decirlo, estuvo a la altura en defensa.

Ania dio confianza al último once y solo realizó un cambio, el obligado por la sanción de Tomás con la entrada del casi inédito Peris en el lateral izquierdo. El míster dejó en el banquillo a Mariano y Roni, de vuelta tras cumplir castigo. Lo de Roni, como se comprobó después, porque el ariete no está del todo recuperado.

Los primeros minutos fueron de arreón algecirista, con los de casa tratando de buscar con movilidad los espacios, pero el Linares aguantando con orden y jugando siempre con sentido. Los de Alberto González apenas chutaron al marco defendido por Pol Tristán, pero amenazaron en varias ocasiones con centros laterales y a balón parado.

El Algeciras cayó en la precipitación durante buena parte del primer tiempo. Esa falta de chispa y acierto se personificó en Leiva, que trató de arrancar algo por su banda pero el canterano no atraviesa un buen momento de forma. Le falta esa chispita de la primera vuelta. Los de Ania perdían con facilidad la bola pero tampoco sufrieron en exceso gracias a una defensa inspirada con Van Rijn y Figueras en todas.

El Linares, que se llevó un susto en el minuto 20 tras un choque entre Admonio y Leiva que dejó al zaguero noqueado sobre el césped, tampoco se atrevió a dar otro pasito al frente para aprovechar esa caraja algecirista. Los azulillos merodearon sin perder la compostura y eso pudo costarles caro porque en el último tramo del primer tiempo el Algeciras estuvo a punto de adelantarse. La primera y más clara ocasión llegó en el 42' en un centro de Bueno -caviar en sus botas- que Romero remató y Ernestas salvó a una mano. Paradón. La siguiente, a renglón seguido, un cabezazo de Iván que atajó el meta lituano.

A la vuelta del descanso, el partido tardó en coger ritmo y no se enfriaba del todo porque la grada seguía ahí alentando y animando sin cesar. El Algeciras, que se volcó en la banda derecha de Renato, probó fortuna con un disparo de Leiva en segunda jugada que se fue alto. El Linares tuvo sus mejores momentos de ataque a partir del minuto 55 cuando Fran Carnicer remató al palo un centro desde la derecha. Pol Tristán había cubierto bien el espacio. Los azulillos llegaron otra vez con peligro en el 58' en una combinación entre Carnicer y Etxaniz que el punta remató fuera por poco.

El partido se rompió unos instantes con los dos equipos de un lado para otro, pero la entrada de Roni a falta de media hora atemperó a un Algeciras que por fin encontró a su ancla. Ania tardó mucho en refrescar al equipo en el minutos finales -había jugadores reventados- y el Algeciras apenas tuvo oportunidades claras para batir a Ernestas. Por el otro lado, el Linares, que también estaba fundido, se guardó las espaldas salvo por una contra en la que Copete pudo haber sacado mucho más. Un disparo de Juan Serrano fácil para Ernestas y una intentona de Almenara fueron las últimas ocasiones de un Algeciras que no tuvo la brillantez y la alegría de otros días.