Golpe de realidad (3-0)

Después de un primer tiempo muy serio, el Algeciras sufrió una desconexión nada más volver del descanso que en apenas cinco minutos le costó el partido. El equipo de Iván Ania fue a Villarreal a intentar dar alcance al mini submarino amarillo, pero se vino con una dura derrota (3-0) que deja a las claras que entre los tres primeros buques y el resto de los mortales hay demasiada diferencia en una competición a 38 jornadas.

Los albirrojos perdieron después de cinco jornadas y de un mes de marzo muy provechoso. Los de Ania suspendieron su test de ambición y quemaron uno de los últimos nueve cartuchos en la pelea por meterse entre los cinco mejores del grupo II de la Primera RFEF. El consuelo es que el resto de aspirantes parecen empeñados en dar emoción hasta el final y los pinchazos se han multiplicado con los Castellón, Nástic y compañía... aunque cuidado con los que vienen de tapados como el Real Madrid Castilla.

El Algeciras naufragó en el Mini Estadi de Villarreal por un error grosero en la salida del balón nada más comenzar el segundo tiempo. Fue el principio del fin porque el filial marcó el segundo a renglón seguido, en otro fallo impropio de un aspirante, y jugó a placer, esperando una contra tranquilamente para sentenciar con ese derroche de talento que acumula de medio campo hacia arriba. Los albirrojos, negados en ataque, pudieron recortar con el 2-0, pero fue el filial el que cerró la cuenta a falta de un cuarto de hora.

Los algeciristas arrancaron con un once con varios cambios -demasiados- con respecto al que empató ante el Linares. Ania recuperó a Tomás, de vuelta tras sanción, y Roni, ya repuesto del tobillo, pero aireó las bandas tras el tirón de orejas a Leiva y Renato. El técnico dio la oportunidad a Juan Serrano y desplazó a Alberto Bueno a un costado. Mariano recuperó su sitio en la defensa en lugar de Jordi Figueras y Duarte ejerció de lateral derecho ante la inesperada ausencia de Almenara, que se cayó a última hora junto a Renato. Lo de esconder la baraja parece que sirve de poco.

El primer tiempo, más lúcido en defensa que ataque, se libró con alternancia de fuerzas y máxima igualdad, aunque el filial pudo decantar la balanza muy pronto. A los dos minutos gozó el mini submarino de su ocasión más clara tras una galopada de Jackson por la izquierda con un centro que Ahn desperdició con todo a favor ante Tristán.

La declaración de intenciones del Villarreal B debió espolear a un Algeciras que se mostró muy serio a la hora de fajarse en defensa el resto del primer tiempo. Los de Ania se acercaron por primera vez a la meta contraria en una internada de Juan Serrano en la que trató de centrar sin éxito. El algecireño sumó sacrificio a una banda en la que Duarte tuvo que lidiar con un auténtico miura. Los de casa volvieron a conectar arriba entre Ahn y Collado pero el disparo del segundo se topó con Tristán.

El Algeciras cerró bien por el centro aunque expuso a veces los flancos ante un rival que quería dominar y lo hacía por tramos, pero tampoco sin generar demasiado peligro. Al filo de la media hora, Jackson volvió a escaparse por su lado y de nuevo Ahn no supo resolver con acierto. Los visitantes tuvieron sus mejores minutos en el último tirón antes del descanso. Alberto Bueno lo probó con una falta que atajó por bajo Jorgensen, Roni casi engancha un disparo limpio y Tomás intentó sorprender con un centro chut. Eran ocasiones a medias, pero existía sensación de que el Algeciras podía hacerlo. Los de Ania, por cierto, reclamaron un posible penalti a Roni antes del descanso. Van a tener que derribar a un algecirista a golpe de katana de aquí a final de liga para que le piten un penalti más. Al tiempo.

Arrancó el segundo tiempo y se produjo el cortocircuito. El Villarreal B llegó con una doble ocasión que salvó Tristán en dos tiempos y, a renglón seguido, un regalo de la defensa algecirista propició el disparo desde la frontal de Carlo Adriano para hacer el 1-0 con un tiro ajustado a un palo.

Aunque el Algeciras trató de replicar con un ataque de Borja hasta la cocina contraria, los de Ania se rompieron y el filial sacó todo su veneno en el minuto 51 para encontrar entre líneas con un maravilloso pase de Jackson a Lozano, que dejó solo a Leal, que llegó desde la derecha como una bala. 2-0.

El Algeciras no tuvo más remedio que abrirse por completo, algo que el Villarreal B aceptó de buen grado. Los albirrojos, con todo, tuvieron llegadas para haber avivado la llama de la esperanza, pero ni Roni ni Alvarito Romero ni Leiva, que entró después, tuvieron tino para batir al meta danés.

El Villarreal B también tuvo sus ocasiones, casi siempre a la contra, en botas de Jackson, Collado y Tasende, pero el que no perdonó fue Lozano en el minuto 75 tras una jugada coral de los amarillos que escenificó el potencial de una de las mejores canteras de España.

El Villarreal B se escapa segundo con 55 puntos y el Algeciras se queda con 44 a un punto del playoff de ascenso a la espera de que acabe la jornada, pero con la sensación de que tiene que hacerlo perfecto para meterle mano a uno de los favoritos de su liga.