Manual de resistencia del Algeciras (0-1)

El Algeciras CF resistió un asedio total en Antequera y salió airoso con una victoria de las que marcan la diferencia, de las que endurece las entrañas de un equipo. ¿Se puede ganar siendo sometido? El Algeciras de Lolo Escobar demostró que sí en El Maulí. Lo hizo con un ejercicio de supervivencia total, con un desborde de sacrificio colectivo infinito, con una capacidad para defenderse casi insoportable para el aficionado sufridor. El Manual de resistencia de Pedro Sánchez se queda corto con el partido del Algeciras en Antequera.

El Algeciras ganó la batalla de los gallitos, el duelo de las dos revelaciones de la temporada en el grupo II de la Primera Federación. Los rojiblancos, como en el Di Stéfano hace un par de jornadas, volvieron a llenar de puntos el maletero del autobús tras imponerse en un campo complicadísimo y contra un rival que jugó a tres mil revoluciones durante 97 minutos.

El conjunto de Lolo Escobar fue sometido como no se había visto en todo el curso. El Antequera no pasó por encima del Algeciras, pero sí lo encerró, lo asfixió por momentos y obligó a los algeciristas a ponerse como un felino panza arriba sacando todo lo que llovía en el área con las zarpas. El esfuerzo defensivo es para que los más pequeños lo vean en vídeo y aprendan que también existe este fútbol. Mención especial para Lucho García, un portero de categoría que vale un Potosí.

Los del Nuevo Mirador arrebatan la quinta plaza al Antequera y regresan a los puestos de play-off de ascenso con 26 puntos. Un meritazo tremendo para un club que puede mirar de cerca a trasatlánticos como el Córdoba y el Málaga, aunque lo más importante es el nuevo salto triple hacia el objetivo de la permanencia en una categoría que no concede nada.

Con la esperada vuelta de Eric Montes al once, Lolo Escobar metió un matiz a su alineación habitual con la entrada de Adrián Sardinero por Marino para emparejarse en ese doble falso nueve con el capitán Iván Turrillo.

'Aerolíneas' Eric Montes

El fútbol alegre y vistoso, desafiante incluso, del Antequera forzó a que el Algeciras tirase del contragolpe para encarrilar muy pronto la tarde. Salió queriendo mandar desde el primer segundo con la pelota el Antequera, cuya primera perdida la aprovechó el Algeciras para armar una contra lanzada por Zequi, que sacó un córner. De ese saque de esquina, botado por Tomás, surgió el testarazo de Eric Montes para adelantar a los rojiblancos a los 3 minutos. Tercer tanto de la temporada de cabeza de aerolíneas Montes Arce, que se impuso a todos y batió al mítico Kameni.

El latigazo del Algeciras fue un paréntesis en el dominio antequerano en un primer tiempo casi de monólogo verdiblanco. A los seis minutos lo intentó Destiny en la primera ocasión clara del cuadro de casa. El chut se fue lamiendo un poste de Lucho, de hecho los aficionados locales casi cantaron gol.

Continuaba apretando el Antequera en un comienzo eléctrico con un disparo de Ale Marín en el minuto 13 que despejó Lucho. Pasado el cuarto de hora, Michael remató alto por poco un centro de Marín. El Algeciras resistía siendo sometido a un asedio total.

El equipo de Lolo Escobar no olía la pelota, pero cuando robaba lo hacía con mucho peligro en esa zona de tres cuartos. Sin embargo, el Antequera inclinaba rápido la balanza e Iván tuvo que despejar un disparo desde la frontal de Yeremy. Los rojiblancos trataban de templar un poco el ritmo porque verdaderamente no había respiro en El Maulí.

Pasada la media hora, el Algeciras se enmarañó con el árbitro y empezó a cargarse de tarjetas. Los rojiblancos armaron una nueva contra que terminó con un centro manso de Roldán por la derecha. La acción vino de un robo de Borja en campo propio. Pero volvía a achuchar el incansable Antequera, que antes del descanso protagonizó varias acometidas por los costados con centros siempre peligrosos.

Paradón de Lucho

El empate pudo llegar cumplido el minuto 45 cuando Lucho García se marcó un paradón extraordinario a saque de esquina en un cabezazo de David Humanes. El colombiano mostró unos reflejos felinos y mantuvo el marco intacto antes de un descanso más que necesario.

El segundo tiempo arrancó con una entrada fea de Michael a Eric Montes que no fue amonestada por Alemán Pérez, que pasaba la mano más a los de casa. Los rojiblancos volvieron a inquietar pronto a balón parado en un córner que Kameni no agarró bien.

El conjunto de Escobar dio un paso al frente y fruto de esa intención estuvo a punto de marcar el segundo. En el minuto 51 la tuvo Zequi, que se quedó solo ante Kameni, pero la cruzó muy flojo y llegó a tiempo Fomeyen para sacarla cuando se colaba hacia la red.

Volvió a la carga el Antequera, que merodeó el empate con una oportunidad de Sousa al filo del 60. Todavía con un mundo por delante y todos los cambios por descorchar. Precisamente fue Javi Medina el primero en mover ficha con la entrada de Loren Burón, más dinamita.

Los locales gozaron de una doble oportunidad en el minuto 65 con un trallazo de Humanes desde la distancia y el posterior rechace que lo mandó alto Marcelo. Poco después, Yac Diori salvó casi debajo del larguero un remache de Humanes tras un rebote por alto de Lucho.

Lolo Escobar refrescó al equipo con Ángel López y Merchán para airear las bandas antes de un último cuarto de hora que se preveía sin tregua. Y así porque el Antequera continuó dominando, aunque los de Javi Medina caían ahora más en la precipitación por esas ansias de un empate que, contra todo pronóstico, no terminaba de llegar. La sensación es que los antequeranos querían meter antes el segundo que el primero.

Entereza hasta el final

Lucho García volvió a lucirse con una palomita a tiro de Luismi en el minuto 88. El asedio persistió durante los seis minutos de tiempo añadido que se tornaron en siete, pero la realidad es que el descuento lo supo manejar de maravilla un Algeciras que minó la moral al Antequera. Los locales se derrumbaron tras el pitido final. El colombiano Lucho se arrodilló y pareció rezar. Si hubo ayuda divina, bienvenida sea porque siempre hay sitio para más algeciristas.