El Algeciras, el compromiso por bandera

Algeciras/El secreto de este Algeciras reside en el compromiso. En el que se ve dentro del césped cada jornada y también en el que no trasciende porque a menudo lo que pasa dentro del vestuario, se queda en el vestuario. El triunfo de prestigio conquistado en Madrid contar el Castilla devolvió al equipo de Lolo Escobar a los puestos de play-off de ascenso del grupo II de la Primera Federación, pero sobre todo recargó el tanque de la ilusión entre el algecirismo.

La fórmula no estaba agotada y Escobar lo demostró. Escobar y sus jugadores porque es una gran verdad que un entrenador no es nada o lo es todo de la mano de sus futbolistas. Este grupo humano, con sus más y sus menos, corroboró en Valdebebas que los quieren estar, están de verdad sin importar las circunstancias, como Juan Rodríguez, como Mario García, como Tomás o como un Yac Diori que celebraba los puntos a muchos kilómetros de distancia concentrado con su selección.

El Algeciras no había puntuado nunca en el Alfredo Di Stéfano ni vencido al Castilla y lo consiguió cuando los pronósticos apuntaban a lo contrario, cuando el bache hacía presagiar a un equipo fatigado y golpeado por los contratiempos. El técnico ha transformado el sello de un Algeciras que no ha perdido un ápice de su capacidad competitiva, más bien al contrario.

El Algeciras se quedó sin Yac Diori, con la selección de Níger en la primera ventana de clasificación para el Mundial 2026, y se pudo quedar sin Juan Rodríguez, por unos problemas personales por los que el club dio permiso al jugador para ausentarse. Sin embargo, el central quiso estar y contribuyó a la victoria. El zaguero no quiere dar trascendencia a lo ocurrido (y está en su derecho) aunque sus compañeros han resaltado el gesto de su compañero.

Tampoco podía estar en el césped Mario García, diagnosticado con una rotura de fibras que le tendrá fuera del campo unas cinco semanas más, pero el chiclanero arropó como uno más desde el banquillo. Se pudo haber quedado en casa, en el sofá, descansando, pero prefirió meterse la paliza en autobús para estar con los suyos.

Tomás Sánchez se retiró con molestias de pubis en el último partido en casa, pero hizo lo imposible para poder llegar al compromiso contra el Castilla. Llegó y fue titular en su costado izquierdo. El algecireño decidió no bajarse del barco en un momento complicado.

Y no solo se trata de no bajarse, también consiste en subirse cuando llega el momento, como ha pasado con Marino Illescas, que acumula dos titularidades y se ha acoplado al sistema a la perfección. Como Marino como Admonio, que está siempre disponible para lo que se le necesita, el resto del banquillo debe saber aprovechar sus ventanas para colarse. El domingo debutó por fin Dani Merchán, otro joven llamado a subir la competencia en la banda zurda.

Doble descanso

Lolo Escobar ha vuelto a dar doble jornada de descanso a sus pupilos. Tras el regreso de la capital, los rojiblancos tienen libre el lunes y el martes, y comenzarán el miércoles a preparar el compromiso del próximo domingo (20:00) contra el Atlético de Madrid B en el Nuevo Mirador.

Los algeciristas se ejercitarán en La Pradera de los anexos el miércoles y el jueves, el viernes en La Menacha y el sábado tienen previsto ultimar la preparación en el césped del Nuevo Mirador.