Tomás Sánchez, la zurda olímpica del Algeciras

El Algeciras Club de Fútboldebutó este sábado en la recién creada Primera RFEF ante un rival de postín como el FC Barcelona B, en el estadio Johan Cruyff, donde consiguió un empate (1-1) que pudo convertirse en victoria de haber aprovechado las numerosas ocasiones de las que dispuso en el tramo final del encuentro y en el que sobresalió un jugador sobre todos los demás. El algecireño Tomás Sánchez, en su estreno en competición oficial con la camiseta albirroja, marcó un gol olímpico antológico que ya es de momento el mejor de la nueva competición.

El jugador fue una de las incorporaciones estrella del club de La Menacha durante este mercado de fichajes. El de El Saladillo, después de haber estado en las filas del Cádiz, el Granada, el CD El Ejido, el Toledo o el Badajoz, su último equipo, sin olvidar su paso por la Balona, era pretendido tanto por equipos de la Primera RFEF como por clubes de Segunda, como el Mirandés o el Real Oviedo. Al final fue Félix Sancho quién dio el golpe de efecto y consiguió un jugador de Algeciras para el Algeciras, en cuya cantera se formó.

Tan solo 73 minutos de competición oficial necesitó el jugador, que aunque es lateral izquierdo con Ania ejerce las labores de extremo, para justificar que el equipo de su ciudad haya realizado el esfuerzo de 'repatriarlo' para la causa de Iván Ania. Un gol de pillo, de jugador avispado y por supuesto, de talento. Tomás levantó la cabeza, vio al guardameta ligeramente adelantado y lanzó una rosca que se coló por la escuadra contraria de una manera limpia y certera.

Minutos antes ya había avisado de que con él, las jugadas a balón parado van a ser un auténtico quebradero para los rivales del Algeciras. Tras la expulsión de Arnau Comas en el minuto 60' por derribar a Álvaro Romero en el borde del área, Tomás también sorprendió a todos y botó la falta rasa y al palo del arquero, que tuvo que tirarse al suelo para despejar como buenamente pudo. Y en el descuento, cuando su equipo estaba volcado a por el gol de la victoria, descolocó a la defensa blaugrana cuando en vez de ejecutar un saque de esquina con un centro alto dio un pase raso a Pepe Mena, en el centro del área, que el centrocampista no supo enviar entre los tres palos.

Ya en la pretemporada el algecireño dio muestras de que esta campaña tiene ganas de hacer vibrar a los de el Nuevo Mirador. Ante el Atlético Baleares fue el encargado de ejecutar el penalti que supuso el 0-1 y a la postre la victoria. Pero su auténtica exhibición llegó en el Trofeo Virgen de la Palma ante el Al-Arabi de Catar. Esa tarde, en una frenética primera parte, el futbolista sacó a pasear su zurda y dio tres excelentes asistencias para que Víctor López, Tresaco y Roni pusieran antes del descanso el 3-2 con el que finalizó el encuentro.

El gol que Tomás marcó ante el Barça B supuso el primero oficial con el club de su ciudad, y lo celebró con mucha efusividad. "Ha sido el primero y como si fuera el último, con rabia", comentó el jugador tras la finalización del encuentro.

Si el futbolista ha optado por volver a Algeciras en lugar de irse a jugar en Segunda no es para ser conformista. "Vamos a competir a muerte en cualquier campo y en cualquier situación. Estamos en las categoría que estamos y valemos lo mismo que cualquier otro equipo de la categoría", afirmó.

Y es que este jugador de zurda precisa no ha venido simplemente a realizar un buen papel en la Primera RFEF, sino que quiere llevar al equipo de su ciudad a cotas más altas. La temporada pasada con el CD Badajoz, al igual que el Algeciras, se quedó a las puertas de subir a Segunda división tras perder en el play-off de ascenso contra el Amorebieta. Sin duda que más de un aficionado albirrojo ya le ha comentado lo que, a pesar de la derrota, se vivió hace unos meses en Almendralejo, en una comunión entre equipo y seguidores pocas veces antes vivida y a buen seguro, a Tomás le motiva contribuir a que esa experiencia se repita y, esta vez, con final feliz.